¿Existe diferencia entre ecoturismo, turismo sostenible y turismo de naturaleza?

Hablaremos sobre si existe diferencia entre ecoturismo, turismo sostenible y turismo de naturaleza. Puesto que existe mucha confusión acerca de lo distinto que es cada término y la clase de turismo que consideran.

Suele confundirse el ecoturismo con mucha facilidad con otros términos que están dentro de los que tienen que ver con el cuidado del medio ambiente. Pocos saben distinguirlo con exactitud y, muchas veces, su uso es aplicado de manera errónea.

¿Cómo saber la diferencia entre Ecoturismo, Turismo Sostenible y Turismo de Naturaleza?

Ante el uso inapropiado del término y otros que están relacionados con este, a continuación explicamos con detalle el significado de cada uno. Al igual que las características que hacen distinto a cada término.

Ecoturismo

Hay varias maneras de definirlo. Se conoce como el negocio que se encarga de organizar las vacaciones en sitios de belleza natural, de tal forma que ayude a las personas de la localidad. Pero que, al mismo tiempo, evite ocasionar daños al medio ambiente. Otros lo definen como viajes responsables al medio ambiente natural que lo protege, manteniendo la vida que posee la gente local, y educando a los viajeros acerca de la naturaleza.

En otras palabras, el ecoturismo es una forma de turismo responsable, donde se observa la naturaleza. Lo que se traduce en ir hasta la naturaleza, conocerla, y observarla, contemplando los elementos específicos y globales que la conforman. Hacerlo de manera responsable, contribuyendo con la población local y sin tener que alterar el medio rural.

3 pilares lo conforman: la conservación de la naturaleza, la capacidad para generar beneficios financieros que favorezcan a la comunidad local y ofrecer experiencias de aprendizaje para los visitantes.

Dichos pilares pueden cubrir una enorme cantidad de eventos, como realizar visitas a las reservas naturales o usar los servicios de los guardaparques locales. Así como la selección de compra de artesanías locales en lugar de recuerdos que son producidos en masa. Creando muchas experiencias positivas tanto para el anfitrión como para el visitante. Manteniendo la idea de dejar el destino en las mejores condiciones.

Turismo sostenible

Ahora bien, el turismo sostenible suele definirse como el turismo que, de manera plena, tiene presente sus impactos sociales, económicos y ambientales, actuales y futuros. Atendiendo las necesidades que poseen los visitantes, el medio ambiente, la industria y las comunidades de acogida. La sostenibilidad es la palabra clave dentro de las cosas buenas que se deben recordar del turismo sostenible.

Resumiendo un poco, la sostenibilidad significa tener la capacidad de sostener o continuar, una actividad o de otra manera al mismo nivel. Un concepto como este, implica seguir muchas líneas distintas, bien sea ambiental, en la vida diaria o en los negocios. A diferencia del caso anterior, el turismo sostenible cuenta con 5 pilares.

Los pilares que conforman a este tipo de turismo son: La política y la gobernanza del turismo. El comercio, la inversión, los datos y la competitividad. Empleo, trabajo decente y el desarrollo de capacidades. Reducción de la pobreza y la inclusión social. Y la sostenibilidad del entorno cultural y natural. El turismo sostenible se centra principalmente en disminuir el impacto del turismo, ofreciendo empleos locales y conservando las culturas.

Pilares como estos también incluyen una enorme cantidad de acontecimientos. Como la obtención de experiencias turísticas auténticas, realizar los pasos necesarios para la conservación del patrimonio y cultura local, conservación de la naturaleza. Contribuyendo con la sostenibilidad de las comunidades locales a través del uso de las opciones disponibles a nivel local. Dejando fondos en la comunidad para invertir en microempresas, infraestructura y educación.

Turismo de naturaleza

El turismo que se encuentra basado en la naturaleza, es conocido como los viajes de placer. Que son emprendidos, en gran parte, o con el único objetivo de disfrutar de las atracciones que ofrece la naturaleza y practicar una amplia variedad de actividades que se basen en ella. De manera sencilla, el turismo de naturaleza es visitar el entorno natural y disfrutar de él.

Se concentra únicamente en la naturaleza y en las actividades que se pueden hacer en ella. Al igual que en la promoción del turismo de naturaleza, que suele incluir un tipo de programa de recreación. Algunos ejemplos que pueden tomarse de esta clase de turismo son las caminatas que se realizan en los parques naturales y las áreas de conservación. Incluyendo también la observación de estrellas y la observación de aves.

¿Cuál es la similitud entre los términos?

Tanto el turismo sostenible como el ecoturismo, se concentran en el medio ambiente, en la naturaleza y en la promoción del turismo, así como del bienestar de los pueblos que conforman la localidad. Estas características que poseen en común hacen énfasis en la necesidad, de manera urgente, de que el turismo habitual realice un cambio hacia una forma de turismo que sea más amigable con el medio ambiente y se concentre en la comunidad.

Las diferencias son las que se encargan de separar estas formas de turismo. Eco tiene que ver con la ecología y la educación, que forman parte de los fundamentos del ecoturismo. Turismo sostenible, que está ligado a la sostenibilidad, la disminución del impacto y la conservación de la cultura local.

El turismo sostenible tiene que concentrarse en la conservación de la naturaleza, la cultura local o el medio ambiente, y ofrecer beneficios para la comunidad de la localidad. Por otro lado, el turismo sostenible, podría estar un poco más extendido, puesto que se puede adaptar mucho mejor a las formas de turismo dentro de un espacio que sea más amplio.

Así, el turismo de naturaleza es un enfoque que se basa en la naturaleza y las actividades que se podrían realizar en ella. En otras palabras, este último tipo de turismo se puede disfrutar con solo pasar un día agradable en un entorno natural. No obstante, como esta clase de turismo no incluye medidas de preservación o actividades beneficiosas para la localidad, no es recomendable como una alternativa de turismo impactante.

Consejos para ser un buen ecoturista

Visitar sitios que se encuentren protegidos o aquellos que sean Patrimonio Mundial, incluyendo alguna visita o actividades que se relacionen con proyectos de conservación. Un gesto como este continuará generando ingresos para dichos proyectos.

Viajar ligero, limitando el equipaje. Al no tener demasiadas cosas en la maleta, se podrá disfrutar mucho mejor de las vacaciones, y se limitará la cantidad de residuos que se produzcan en el destino de las vacaciones.

Antes de viajar, aprender tanto como se pueda sobre el destino. Es de gran importancia conocer sobre sus recursos naturales, su cultura, los hábitos de los habitantes y si hay algún riesgo ambiental, como por ejemplo las sequías, o si los incendios forestales representan una amenaza.

Usar operadores turísticos locales que cuenten con buena reputación, es preferible que sean aquellos que contribuyen a la conservación de ellos mismos. Tratar de seguir los códigos locales, por ejemplo, los que están asociados al comportamiento o con la vestimenta. Sobre todo si se realizan visitas a sitios naturales, culturales o que sean sagrados.

Escoger un alojamiento que sea amigable con la naturaleza, pero no hay que dejarse engañar por un hotel que se haga llamar ecoturista. Será necesario preguntar acerca de su política medioambiental, si implementan medidas para el ahorro de agua y energía. O incluso si contribuyen con los esfuerzos locales para la conservación y ofrecen apoyo hacia las comunidades locales.

Tratar de llegar al destino en autobús o tren. Ya que se puede observar mucho mejor el paisaje y se disfrutará de la compañía de las personas.

Elegir con sabiduría la comida en las vacaciones. Siempre que exista la posibilidad, comprar alimentos del sitio que se encuentren de temporada.

Nunca comprar recuerdos que estén hechos con especies en peligro de extinción. Algo como esto incluye a las tortugas, corales y muchos otros. También hay que tener mucho cuidado al llevarse plantas o semillas, comprobando que estas no se conviertan en especies invasoras.

Si se realiza un tour para conocer la vida silvestre, escoger un guía que tenga buena reputación y evite molestar a los animales.

Una buena contribución como viajero es hacerse colaborador o miembro de las organizaciones que se encargan de conservar el medio ambiente del lugar.

Consejos para un turismo sostenible

• Usar recursos naturales con moderación, recordando que son bienes escasos.
• Procurar que la única huella que se deje sean las del calzado. Al visitar arrecifes de coral, es importante informarse adecuadamente.
• Si se adquieren regalos y recuerdos, buscar productos que favorezcan la expresión cultural de la localidad.
• Disfrutar del contenido cultural, gastronomía, costumbres y tradiciones de las poblaciones locales.
• Planificar el viaje con proveedores que ofrezcan garantía de alta calidad y, sobre todo, respeto por la humanidad y por el medio ambiente.

Disfruta del ecoturismo, diviértete y viaja de forma responsable, cuidando del medio ambiente y por supuesto, del planeta.

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Fuentes: La Vanguardia, Ecoturism, Turismo sostenible.