Por Agostina Herrera
Hay muchas formas de hacer un viaje, pero de todas ellas el ecoturismo es la mejor opción para personas aventureras y amantes de la naturaleza. Se trata de realizar un viaje de manera responsable mientras también disfrutas de todas las maravillas del entorno.
Es una propuesta alternativa a la actividad turística tradicional con la intención de reducir el impacto negativo que ésta suele tener sobre el entorno natural, social y cultural, y de esta forma, proteger las zonas naturales utilizadas como centros de atracción.
Si los lugares que visitamos nos resultan tan asombrosos, ¿no quisiéramos acaso que otros también pudieran conocerlos?
La Reserva Ecológica Chontachaka ofrece este tipo de alternativa, promoviendo un turismo más amigable con nuestro entorno y con la intención de conservar los suelos amazónicos. Desde 2006, miles de viajeros de todas partes del mundo han escogido a la reserva peruana como destino, alojándose como ecovoluntarios para vivir una experiencia única en el Amazonas.
Chontachaka, situada en el Parque Nacional del Manu, alberga cientos de especies mamíferos y anfibios, más de mil especies de aves y millones de tipos de insectos; además de contar con una gran diversidad de flora. Entre los infinitos colores selváticos y los sonidos animalescos de numerosas especies, se encuentra la reserva compuesta por 4 bungalows de madera donde se distribuyen las habitaciones, los baños, el comedor y la cocina comunitaria, un agradable espacio para convivir y conocer personas de diferentes partes del planeta.
El ecovoluntariado consiste en realizar actividades como reforestación, monitoreo, investigación y aprendizaje de las plantaciones y concientización. A cambio se ofrece alojamiento y las 3 comidas diarias. Trabajar como voluntario en la selva puede ser todo un desafío, pero el aprendizaje y la recompensa es enorme, además de saber que estamos colaborando con la preservación de nuestro planeta.
¿Qué hacer en la selva peruana?
Si eliges visitar el amazonas de Perú, hay fantásticas opciones para disfrutar de los tesoros de la naturaleza. Por ejemplo:
- Bañarte en las increíbles cascadas de aguas cristalinas y sus arroyos; por qué no también animarte a navegar por los ríos afluentes del amazonas donde se encuentran los maravillosos delfines rosados.
- Subir a lo alto de la cumbre y ver un verde horizonte de infinidad de árboles.
- Comer cacao 100% puro y orgánico.
- Conocer las comunidades nativas, aprender sobre las culturas ancestrales de la zona, sus hábitos y plantas medicinales.
- Hacer una visita al santuario de animales Dos Loritos también es una opción súper recomendada por los viajeros.
- Y si te alojas en Chontachaka no puedes perderte la oportunidad de dormir una siesta con la mona Paula.
¡No olvides llevar linterna para cuando se esconda el sol y una cámara de fotos! Donde mires habrá bellas imágenes que querrás compartir y guardar de recuerdo para siempre.
¿Quieres saber cómo ayudar a la Reserva Chontachaka con su proyecto de recuperación de los suelos amazónicos desde tu casa?
Ingresa a este link -> http://bit.ly/2v3jmZH
Más info: [email protected]