Hoy más que nunca, aprender una vieja conocida labor manual como es la costura nos permite reconectar con el hogar, con la creatividad y con la calma, al tiempo que desarrollamos una habilidad clave para la construcción de un vínculo más sostenible con nuestras prendas.
Pasemos al listado de las 10 razones por las cuales aprender a coser o bien retomar ese hobby que habías dejado de lado por falta de tiempo. Toma hilo o aguja o desempolva tu vieja máquina de coser y pon tus manos a trabajar: ¡motivos no te van a faltar!
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1. Es Entretenido
Coser es jugar, es armar un rompecabezas cuyas piezas encajan perfectamente para la construcción de algo más grande, de un resultado final. El disfrute está en el mismo proceso y en la posibilidad de crear algo concreto con nuestras propias manos.
2. Fomenta nuevas habilidades
Coser no solo es divertido, además nos permite desarrollar capacidades físicas y motoras, ejercitar algunos aspectos de la personalidad (como la paciencia), y desarrollar la capacidad de focalizarnos en objetivos de forma metódica.
3. Es Sanador
Coser es una actividad relajante y repetitiva que nos sumerge en un estado de mindfulness o atención plena mejorando la salud mental y el bienestar emocional. Nos invita a concentrarnos en la tarea presente, a apreciar y observar lo que está sucediendo aquí y ahora, pudiendo así descansar de los pensamientos y las preocupaciones que nos aquejan.
4. Promueve la Sostenibilidad
En una época en la que las prendas son rápidamente desechadas, saber coser nos brinda el poder de alargar la vida útil de cada prenda a través de la posibilidad de su reparación y personalización.
5. Incrementa la Capacidad Creativa
Coser y crear patrones es combinar elementos y tomar decisiones respecto al orden de esos elementos. En este sentido, la creatividad no es inspiración divina ni surge de cero, sino que viene de la capacidad de reordenar creativamente elementos ya conocidos.
6. Expande nuestra Zona de Confort
Crear algo nos enfrenta con situaciones nuevas que nos llevan fuera de lo conocido, nos exige encontrar el modo de resolver los obstáculos una y otra vez, fomentando la flexibilidad y el pensamiento lateral.
7. Es Económico
Solo se necesita aguja e hilo para comenzar. No hace falta más que eso y muchas ganas de comenzar. Más adelante podemos acceder a una máquina, pero no es requisito para trabajos simples de principiantes.
8. Aumenta la Propia Estima
La práctica genera mejores resultados y esto, a su vez, incrementa la confianza en lo que hacemos. Se trata de un ciclo que se retroalimenta para una mayor autovaloración.
9. Puede ser una Fuente de Ingresos
Para muchas personas, la costura es una fuente de trabajo que puede ser realizada incluso desde casa, una habilidad que puede abrir nuevas oportunidades económicas cuando es realizada bajo condiciones justas.
10. Crea Comunidades
La costura conecta virtual y presencialmente a grupos de personas con los mismos intereses. Sentarse a coser o tejer en grupo es una práctica ancestral. Hoy incluso existen comunidades virtuales donde compartir e intercambiar saberes haciéndonos parte de algo más grande.
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