En Argentina la economía circular avanza constantemente, ya es una tendencia instalada desde los últimos años a nivel global y los emprendimientos sustentables son un pilar fundamental para buscar cambios en el medio ambiente.
Dos hermanos cordobeses son los protagonistas de este proyecto con gran impacto ambiental reduciendo plásticos, como también económico en el país. Giuliano y Franco Frola son los creadores de la primera fábrica de durmientes plásticos de la Argentina. La pyme familiar que además de estos hermanos innovadores también forman parte sus padres, Mónica y Raúl, nació en 2013 con la consigna de la sustentabilidad, enfocada en lograr un cambio de paradigma: fabricar desde la reutilización.
La planta de Circularis (antes llamada GRUPO RFG) está en Monte Cristo, en las afueras de la Ciudad de Córdoba.
Los durmientes que van a ser reemplazados originalmente se hacían de quebracho colorado, una madera dura, pero de una especie protegida actualmente y que tarda hasta unos 80 años en regenerarse. Los nuevos durmientes plásticos creados por los hermanos irán en lugar de los de madera que necesiten ser reemplazados.
- ¿De dónde proviene el plástico que utilizan para la fabricación?
El material se compra a cooperativas de reciclaje, que a su vez son los que reciben y clasifican este tipo de materiales de los residuos domiciliarios o empresariales.
Para los 100.000 durmientes a fabricar, se estima que se reutilizarán 12 millones de kilos de plástico de difícil reciclado. Ayudarán a acondicionar aproximadamente los 20.000 km de vías férreas existentes en el país.
A base de testeos, los hermanos Frola probaron distintos tipos de fórmulas hasta lograr lo que necesitaban: un producto resistente compatible con las necesidades de un tren de carga y aprobado por el INTI (Instituto Nacional de Tecnología Industrial).
- ¿Cómo es el proceso?
Se mezclan los ingredientes plásticos en diferentes proporciones, se comprime y se funde en un molde. Tuvieron que desarrollar su propia maquinaria: un ejemplar de 18 m de alto y 5 de ancho. El material se calienta para lograr homogeneidad entre los distintos tipos de plástico. Tras añadir aditivos y con un sistema de moldeo, elaboran durmientes de vía corrida, de cambio de vía y los llamados “obra de arte” (los que están en los puentes; más cuadrados y más gruesos). Tienen una durabilidad de hasta 50 años y con la posibilidad de luego ser reutilizado nuevamente la materia prima. No se astillan ni se pudren.
Además la empresa Circularis tiene un gran impacto de empleo directo ya que se proyecta la generación de cerca de 200 puestos de trabajo: por una parte la empresa cordobesa anunció la incorporación de 50 empleados en su planta, mientras de modo indirecto, a través de la tarea de cooperativas que forman parte del proceso productivo y de selección de la materia prima, se sumarían otros 160 trabajadores.
Sin dudas, el beneficio ambiental de la incorporación de este proyecto es muy alto, como así también el impacto económico nacional.
- Fabricación de durmientes sintéticos a nivel mundial
En Rusia, Europa, Estados Unidos y Brasil ya hay durmientes sintéticos, algunos hechos a través de plástico virgen y otros a partir del reciclado. Circularis fue la primera empresa en Argentina en producirlos y la segunda en Sudamérica.
¿Piensas que éste es un gran aporte para buscar mejorar el medio ambiente?
Fuente: TN/CNN.