Trepó a la Fontana di Trevi en busca de agua y lo que pasó sorprendió a todos

Una mujer se trepó a la Fontana de Trevi. En medio del calor que azota a Italia, ella quiso llenar su botella con agua de la fuente. El extraño suceso tuvo un percance que sorprendió a todos y que se viralizó en las redes.

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Una intensa oleada de calor en Europa

Sin duda, una alteración climática derivada del cambio climático. En el caso de Italia, las temperaturas superaron los 30 grados en casi toda la nación, llegando a sitios con más de 40 grados a la sombra. ¡La capital no escapó a esa situación!

Sabemos que Roma es una ciudad turística. Alberga los monumentos del antiguo Imperio Romano, así como obras arquitectónicas de varios periodos: Renacimiento, Barroco, etc. Cuenta con plazas, iglesias magníficas y esculturas al aire libre.

Uno de los espacios romanos más visitados es la Fontana di Trevi. Los turistas no pierden la ocasión de lanzar una moneda al agua, pidiendo un deseo. Pero, hay una clara norma: queda vetado entrar a la fuente, hay que verla desde su borde.

Una mujer se atrevió a trepar por las esculturas de la Fontana di Trevi

Hacía mucho calor. ¡Demasiado! Y la gente buscaba el ambiente fresco de la Fontana di Trevi, ya que aire se refresca por efecto del agua. Entonces, todos quedaron sorprendidos al ver a una fémina encaramarse sobre las esculturas.

Un video, subido a la cuenta de TikTok @perrinebridge, muestra las peripecias de la señora. La mujer escalaba las rocas, talladas para dar forma a la fuente. Se agarraba de salientes, molduras y pisaba con cuidado para no caerse.

En Roma la Fontana di Trevi ha sido siempre un sitio muy, muy visitado. ¡Así que a la señora no le faltaba público! Lo más raro es que ella escalaba sin que la policía apareciese, ni tampoco percatarse que la gente la miraba y señalaba.

Tomando mucho tiempo, sujetándose de los salientes de las esculturas, llegó hasta la caída de agua de la fuente y llenó una botella que llevaba consigo. La señora vestía de modo casual: gorra, remera, pantalones y zapatillas deportivas.

¿Y al final que sucedió?

Con la misma parsimonia con que entró a la fuente, regresó sobre sus pasos y salió. Ni prestó atención a toda la gente que la miraba, sino que caminó entre la multitud como si nada. Mientras se alejaba, se oyó un tardío silbatazo de un policía.

En el video se aprecia que el uniformado regaña a la señora, quien parece no reaccionar ante la recriminación. Luego, el policía le pide a la mujer que la acompañe y ambos se alejan, bajo el radiante sol romano.

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¿Qué más sabe de esta mujer? Nada: ni su nombre, ni tampoco si fue penalizada. Ella tuvo calor, tuvo sed, y quiso el agua de la Fontana di Trevi. Su peripecia quedó grabada en un video y en la memoria de los turistas que la vieron ese día en Roma.

Fuente:

La Nación