A los 81 años, Mick Jagger mantiene una vitalidad sorprendente gracias a un estilo de vida que mezcla ejercicio disciplinado, alimentación consciente y bienestar emocional. Lejos de los excesos del rock, desde los 58 años decidió abandonar el alcohol y las drogas, adoptando hábitos saludables. "El alcohol fue la droga más difícil de dejar", confesó en su momento. Desde entonces, Jagger no ha mirado atrás, demostrando que nunca es tarde para reinventarse.
Un cuerpo en movimiento constante
Para mantener su fuerza y flexibilidad, Jagger corre 12 kilómetros diarios, complementando su rutina con ballet, yoga y pilates. Su guía en esta transformación ha sido el entrenador noruego Torje Eike, experto en alto rendimiento, quien diseñó un plan enfocado en la resistencia y el equilibrio. Esta dedicación no solo le permite conservar su figura esculpida, sino también mantener el ritmo en sus presentaciones en vivo, donde sigue recorriendo los escenarios con la energía de un joven de 30 años.
Nutrición y hábitos alimenticios: Orgánico y con sazón india
Jagger también ha cambiado radicalmente su alimentación. De la mano de Jo Wood, exesposa de Ronnie Wood, adoptó una dieta orgánica centrada en carbohidratos saludables como pan integral, arroz y legumbres, que le proporcionan la energía necesaria para sus rutinas. Además, es un amante de la comida india y tiene una receta favorita: curry de gambas, incluido en el libro Rock'n'Roll Cuisine. Su estilo de vida moderado prescinde completamente de alcohol, una decisión que, según él, ha sido esencial para alcanzar su bienestar actual.
La transformación más grande
Lejos de las leyendas sobre pactos con el diablo, como las que rodean a figuras como Robert Johnson o Paganini, la transformación de Jagger no es más que el fruto de autodisciplina y compromiso personal. Isadora Puiggené, autora del libro Pacto con el Diablo. Los Hábitos Saludables del Rolling Stone más Dinámico del Mundo, destaca cómo Jagger encontró satisfacción en lo que antes hubiera resultado impensable: hábitos saludables y control sobre sus impulsos.
"Dejar los excesos fue aceptar que ni siquiera los Stones son inmortales", afirmó el propio Jagger en 2001. Esta declaración refleja su capacidad de adaptación y reinvención, marcando un camino hacia el bienestar sin sacrificar su esencia artística.
Más allá del escenario: Un legado inspirador
En la actualidad, Jagger sigue inspirando no solo por su música, sino también por su capacidad de transformar su estilo de vida. Su ejemplo muestra que, sin importar la edad, siempre es posible adoptar nuevos hábitos que fortalezcan tanto el cuerpo como la mente. ¿El secreto de su longevidad? Salir de la zona de confort, superarse cada día y apostar por un equilibrio físico y emocional.
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