Durante mucho tiempo, se ha sostenido la creencia de que en el amor, "los polos opuestos se atraen". Sin embargo, un estudio reciente publicado en Nature Human Behaviour, que analizó millones de relaciones a lo largo de más de un siglo, sugiere que esta creencia podría no ser del todo cierta desde una perspectiva científica.
En este estudio, los investigadores llevaron a cabo un análisis exhaustivo que abarcó más de 130 rasgos y millones de parejas. Tanya Horwitz, una de las autoras del estudio, afirmó: "Nuestros hallazgos demuestran que las aves del mismo plumaje tienen más probabilidades de juntarse".
El estudio revela que rasgos como la tendencia política (82 %) o la edad en la que se tuvo la primera relación sexual (89 %) tienden a ser más similares en las parejas que en las parejas con rasgos opuestos. En otras palabras, las personas tienden a sentirse atraídas por aquellas que comparten rasgos similares o idénticos, al menos en un 3 % de los rasgos analizados.
Lee también: ¿Personalidades realista o pesimista?: Descubre qué tipo de persona eres.
Este descubrimiento tiene implicaciones importantes en la investigación genética, ya que cuestiona la suposición previa de que el apareamiento humano es aleatorio. Matt Keller, autor del estudio, señala que el "apareamiento asortativo", donde las personas con rasgos similares forman parejas, puede sesgar los resultados de los estudios genéticos.
Para llevar a cabo esta investigación, los científicos realizaron un metaanálisis de 22 rasgos en 199 estudios que abarcaban más de un siglo. Además, analizaron datos de casi 80.000 parejas heterosexuales en el Reino Unido, utilizando información del Biobanco del Reino Unido, que contiene datos genéticos y de salud detallados.
Lee también: Con 90 y 83 años, se conocieron por chat y se dieron una segunda oportunidad.
En ambos análisis, se encontraron correlaciones particularmente altas en rasgos como las actitudes políticas, religiosas, el nivel educativo y el coeficiente intelectual. Por ejemplo, la correlación para los valores políticos fue del 0,58 en una escala donde 1 indica que las parejas siempre comparten el rasgo.
Los resultados también sugieren que incluso en situaciones donde se percibe que podemos elegir nuestras relaciones, pueden existir mecanismos subyacentes de los que no somos plenamente conscientes. Este estudio desafía la noción romántica de que los opuestos se atraen y nos invita a considerar que, en muchos casos, las similitudes pueden ser el imán que une a las parejas.
Fuente: Muy Interesante.