Egloo es un calefactor de terracota que funciona a base de velas. Gracias a este invento, es posible calentar cualquier habitación de manera ecológica y barata. Además, por ser pequeño y liviano, se lo puede trasladar a distintas partes del hogar según sea necesario.
El diseñador italiano Marco Zagaria ideó Egloo para frenar el constante uso de electricidad, una de las principales fuentes de emisión de gases de efecto invernadero. Así, ofrece una alternativa para calentar el ambiente doméstico a base de velas, energía más barata y ecológica. Para ello, aprovecha las características de la terracota, material que almacena el calor y lo libera lentamente por radiación, incluso luego de apagar el fuego.
El calefactor está compuesto por cuatro elementos. La base sirve para colocar las cuatro velas que son necesarias para su funcionamiento. Sobre ella, se ubica una parrilla que deja espacio para que entre el aire necesario para la combustión, a la vez que sirve de soporte para los dos domos. El más delgado de estos, ubicado internamente, almacena la mayor parte del calor, que es conducido al domo externo, más grande. El proceso sucede lentamente, por lo cual el dispositivo es seguro al tacto.
Al usar Egloo, la temperatura de la habitación aumenta entre 2°c y 3°c en media hora. El calefactor alcanza su máxima temperatura en cinco minutos. Para el domo interno, esto equivale a entre 140°c y 180°c. En el caso del domo externo, es de entre 30°c y 50°c. Las velas tienen una duración promedio de cinco horas y alcanzan para calentar un ambiente de 20 m2.
Como pesa sólo 1 kg, se lo puede trasladar fácilmente de una habitación a otra. Además, su pequeño tamaño permite colocarlo en casi cualquier lugar. Por su diseño estético, puede servir incluso como elemento decorativo y, al ser comercializado en distintos colores, se puede elegir una tonalidad acorde al estilo del hogar.