Lactancia tándem: ¿de qué se trata y cuáles son sus beneficios y riesgos?

Se trata de un método muy beneficioso para las madres que están embarazadas nuevamente. Esto permite fortalecer los vínculos entre madre e hijo y también entre hermanos, ya que ambos comparten la leche materna de su madre. Aunque puede que muchos no conozcan de qué se trata la lactancia tándem. Por esta razón es importante saber que es, sus beneficios, riesgos y sobre todo como hacerla correctamente.

Lactancia tándem ¿Qué es?

Consiste en un tipo de lactancia en la que una madre que aún se encuentra amamantando a su pequeño, queda embarazada una vez más. Por lo que continúa dándole pecho a su primer bebe, mientras que una vez nazca el segundo, ambos podrán amamantarse al mismo tiempo.

La lactancia tándem es bastante común en la actualidad, sobre todo en mujeres que tienen dos o más embarazos seguidos. Aunque quizá para algunos sea un tema un tanto polémico, este tipo de lactancia permite mejorar la relación entre hermanos.

Hoy en día, las mujeres viven la experiencia de la lactancia a su manera. En algunos casos se trata de algo uno de los procesos más hermosos y mágicos en la vida de una madre. Sin embargo, existen mujeres a las que le resulta bastante trabajoso y problemático. Cuando es necesario amamantar a dos pequeños al mismo tiempo, la tensión y la dificultad suelen incrementarse. Por lo que es importante saber cómo hacerlo correctamente.

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Recomendaciones para lactancia en tándem

Si es la primera vez en el mundo de la lactancia tándem pdf, es necesario que se tomen en cuenta algunas recomendaciones para la lactancia en tándem. De esta forma, se evitará cualquier riesgo para la madre y también para los pequeños.

En las primeras semanas de embarazo, la sensibilidad en los pechos suele incrementarse significativamente. Durante la lactancia en tándem problemas como este ocurren en el transcurso del primer trimestre y se reducen cuando llega el segundo trimestre. Lo que puede provocar una serie de molestias cuando se está alimentando al primer hijo.

Del mismo modo, se produce un incremento hormonal, mientras que la estructura de los pechos pasa por varios cambios. Tanto los senos como los pezones se vuelven más sensibles y al mismo tiempo, más flácidos, sobre todo entre la tercera y cuarta semana de gestación. Esto provoca que aparezcan diversas molestias durante el proceso de lactancia. Debido a que la madre aparte de sobrellevar el embarazo y también debe sentir la succión y presión en sus pezones mientras alimenta al otro pequeño.

El cuidado de los pechos es muy importante cuando se implementa este u otros tipos de lactancia. Lo recomendable es lavarlos solamente con agua preferiblemente tibia, evitando el uso de productos como geles o jabones.

Esto se debe a que alrededor de la areola se encuentran unas protuberancias diminutas que se llaman glándulas de Montgomery. Estas segregan una especie de aceite que sirve para hidratar los pezones, al usar productos como los mencionados esta sustancia se pierde.

Después de lavar los pechos, lo mejor es secarlos suavemente con una toalla o dejarlos al aire por unos hasta que se sequen. En caso de que los pezones presenten pequeñas grietas, colocar un poco de la propia leche materna permite que se cicatricen rápidamente.

Producción de leche durante la lactancia tándem

Cuando una madre se encuentra en proceso de lactancia tándem, se produce un incremento de leche materna. Esto se debe a que ahora son dos los bebe que necesitan alimentarse por medio de la lactancia. Sin embargo, es posible que durante el segundo trimestre la producción de leche disminuya debido al proceso hormonal.

Por otro lado, cuando la madre queda embarazada nuevamente, su cuerpo se concentra más en el bebé que está dentro de su vientre. Cuando el momento del parto está próximo, el cuerpo comienza a producir una sustancia que se conoce como calostro. Una vez nace el nuevo bebé, la leche será destinada especialmente para este durante un tiempo.

Cabe destacar, que el primer niño no tendrá ningún problema al consumir leche materna con calostro. Sin embargo, es recomendable reducir la cantidad, ya que su sabor puede volverse ligeramente salado y en ocasiones, puede provocar diarrea.

Para evitar problemas entre los hermanos, las madres suelen distribuir el proceso de lactancia dejando un pecho para cada pequeño. De esta forma, ambos pueden amamantarse al mismo tiempo, también puede iniciar uno y luego seguir el otro. La idea es fortalecer la relación entre la madre y los pequeños.

Lactancia en tándem beneficios

Existen muchas ventajas al momento de practicar la lactancia tándem, estas no solo se ven reflejadas en la salud de la madre. Los pequeños también pueden verse favorecidos con este tipo de lactancia. Al momento de practicar la lactancia en tándem beneficios como los siguientes pueden tomarse en cuenta:

- El bebé que acaba de nacer no pierde tanto peso durante sus primeros días de nacido. Además, suelen recuperarse más rápido cuando se amamantan de forma constante. De igual forma, su hermano ayuda con la estimulación de los pechos y así, el más pequeño podrá alimentarse sin problemas.

- Debido al incremento en la producción de leche, no existe ningún riesgo de que el recién nacido padezca de algún problema con su crecimiento.

- La madre ha ganado experiencia al darle pecho al primer hijo, por lo que la ansiedad se ve reducida considerablemente.

- No se produce ningún efecto negativo en la madre por amamantar a los dos pequeños al mismo tiempo.

- Se reduce el riesgo de padecer mastitis, esto se debe a que ambos hijos ayudan a que las glándulas se vacíen cuando su madre les da pecho

- La leche sube rápida y fácilmente, el hermano mayor es importante en este caso, ya que su succión le permite al más pequeño alimentarse sin problemas.

- Durante la lactancia tándem experiencias muy hermosas han podido disfrutarse entre la madre y sus pequeños. Esto se debe a que juntos pueden crear un gran vínculo que los vuelve más cercanos.

Lactancia en tándem riesgos

Ahora bien, las consecuencias de amamantar embarazada pueden provocar temor en muchas madres que están en esta situación. Sin embargo, durante la lactancia en tándem riesgos y contraindicaciones son menores de los que se piensan. Aun así, es importante acudir a un especialista antes de practicar este tipo de lactancia.

Las infecciones como la moniliasis o candidiasis pueden verse como el riesgo más grave cuando se trata de lactancia tándem. No obstante, esto puede resolverse fácilmente dándole un pecho a cada pequeño por separado. Además, no se recomienda amamantar a ambos usando solo uno de los pechos.

En algunos niños el consumo de calostro puede generar ciertos problemas en el estómago. Esto se debe a que dicha sustancia tiene propiedades laxantes que surten efecto en ciertos niños, lo que podría provocarle diarrea al primer hijo.

Por último, amamantar a dos niños al mismo tiempo puede ser bastante agotador y estresante para la madre. Motivo por el que no se recomienda practicar este tipo de lactancia si falta poco para el parto.

Durante el embarazo y también en la lactancia, la madre necesita el apoyo de toda la familia, especialmente la de su pareja. De esta forma, estos procesos pueden llevarse con mayor tranquilidad y no existirá ningún riesgo para los involucrados.

Fuentes:

mejorconsalud

serpadres

bebesymas