Estrés laboral: qué es y cuáles son sus síntomas

Fatiga, falta de energía, cansancio, dificultad para concentrarse y la tristeza son algunos de los síntomas del estrés laboral. ¿Alguna vez lo has sufrido? ¿Crees que en este momento estás pasando por un episodio de estrés laboral? Conoce qué es exactamente, cuáles son las consecuencias y cómo te puede afectar.

El estrés laboral ciertamente no es un término nuevo, a lo largo de los años se le ha dado diferentes nombres como burn-out o surmanage, entre otros. Todos tienen en común el estrés. Veamos más a fondo cuál es su definición y cómo se puede identificar.

¿Qué es el estrés laboral?

Al ver la definición del estrés laboral nos encontramos que este es un fenómeno que cada vez es más usual en la población mundial. Este es un conjunto de respuestas cognitivas, fisiológicas y emocionales que generan ante aspectos adversos de la organización, contenido y ambiente del trabajo. En otras palabras, es una reacción física o mental ante un reto o cambio que afecta al trabajo y que va a pasar en entorno donde se desempeñan funciones profesionales.

¿A quién afecta el estrés laboral?

Las personas pueden experimentar el estrés laboral cuando sienten un desequilibrio entre lo que exige el trabajo y los recursos que se tienen para satisfacer esas exigencias. La población de riesgo son las personas que tienen entre 35 y 45 años.

El estrés laboral se puede originar en esa etapa de la vida debido a que se combina una exigencia personal (donde se tiene una carga de hijos, parejas) con un nivel de mercado laboral que es muy competitivo. Esto significa que se añade a la carga personal que se lleve a la presión de la vida laboral.

¿Cuáles son los síntomas del estrés laboral y sus consecuencias?

Cuando se está ante una situación de desequilibrio, el mismo cuerpo activa los procesos típicos del estrés. Esto puede ser un problema cuando se prolonga en el tiempo. Como consecuencia los sentimientos y las emociones negativas van a ser dominantes, superando a los aspectos positivos de la vida. Todo esto a su vez desencadenará signos fisiológicos y alteraciones de conducta como:

Emocionalmente: aburrimiento, ansiedad, agresión, fatiga, sentimiento de culpa, apatía, depresión, irritabilidad, mal genio, nerviosismo, vergüenza, tristeza, tensión, baja autoestima y sensación de soledad.

Pensamientos: incapacidad para tomar decisiones, no poder concentrarse, olvidos frecuentes, hipersensibilidad ante la crítica, bloqueos mentales, entre otros.

Comportamiento: consumo de drogas, falta de apetito, predisposición a accidentes, conductas impulsivas, comer, beber o fumar en exceso, excitabilidad, incapacidad de descansar, explosiones emocionales, temblores, alteraciones en el habla y risas nerviosas.

En lo laboral: relaciones laborales pobres, mal clima en la organización, mala productividad, antagonismo con el trabajo, absentismo, altas tasas de cambio de trabajo y falta de satisfacción con el desempeño del empleo.

Las consecuencias del estrés laboral se reflejan directamente en la calidad de vida de aquellos que lo sufren, llegando a ser el motivo de la baja laboral en muchas ocasiones. El entorno laboral incide en muchas áreas de las personas, como en la psicología, relaciones, vida personal y económica. Incluso en el estado físico.

Situaciones que pueden generar el estrés laboral

-Falta o exceso de trabajo.

-Plazos de entrega de trabajo insuficientes para completar un proyecto de forma satisfactoria.

-Ausencia de una cadena de mando clara o descripción del trabajo.

-Falta de recompensa o reconocimiento luego de un buen desempeño laboral.

-Imposibilidad de expresar quejas.

-Contar con múltiples responsabilidad pero sin autoridad o poder de decisión.

-Rodearse de compañeros, superiores o subordinados que no cooperan o apoyan.

-Poca satisfacción en el producto terminado y no tener control sobre el resultado.

-Inestabilidad laboral o inseguridad sobre el puesto del trabajo.

-Exponerse a prejuicios por sexo, edad, raza, etnia o religión.

-Ser víctima de violencia, amenazas o intimidaciones.

-Trabajar en condiciones peligrosas o desagradables.

estrés laboral cómo evitar consecuencias

Consejos para prevenir el estrés laboral

El estrés laboral no tiene que ser permanente o recurrente en el personal de una empresa. Existen ciertos consejos que se pueden aplicar en el entorno laboral que permiten que los empleados se sientan más relajados y cumplan con cada una de sus tareas de forma satisfactoria. Entre ellos se encuentran:

-Respetar el espacio de almuerzo.

-Hacer paréntesis durante la jornada de trabajo para estirar el cuerpo o distraerse con otra cosa. Se recomiendan pausas a media mañana y a media tarde.

-Cambiar de posición del cuerpo, caminar, estirar los pies, levantarse. Todo con el fin de relajarse.

-Concentrarse en las tareas logradas y no en lo que está pendiente.

¿El estrés laboral tiene tratamiento?

Como vimos anteriormente los síntomas van a implicar una gravedad e impedimento real. El tratamiento en casos de estrés laboral puede ser la combinación del apoyo psicológico y farmacólogo. En lo farmacológico encontramos ansiolíticos y antidepresivos que pueden aliviar rápidamente y modificar los síntomas más agudos que se presenten.

Por otra parte, el acompañamiento terapéutico se debe hacer con el objetivo de que se resuelvan los aspectos de personalidad. Es esencial que se generen en conjunto estrategias que permitan lograr un mejor desempeño laboral.

¿Cuándo es necesario asistir a una consulta por estrés laboral?

Todas las personas pueden tener semanas donde están más desganadas o alteradas que otros días debido a las dificultades existentes para cumplir con una demanda. El problema en realidad se da cuando estas situaciones son recurrentes y los síntomas se van a independizar de la situación puntal. Ejemplo, después de una semana agotadora, el trabajo disminuye, pero se sigue con desgano o falta de energía. Esto quiere decir que ya los síntomas se independizaron y se ven los signos del estrés. Con se llega a este punto es bueno consultar con un experto.

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