Vida en Venus: un estudio relaciona al planeta con microorganismos terrestres. En este sentido, durante siglos la esfera venusina fascinó a los científicos por su proximidad y similitudes con la Tierra, pero también por ser un lugar extremo, con temperaturas complejas y una atmósfera ácida que parecían descartar cualquier posibilidad de vida.
Sin embargo, un equipo de científicos planteó una hipótesis que podría cambiar la comprensión sobre la vida en el universo: la posibilidad de que organismos terrestres hayan llegado a Venus a través de impactos de asteroides. Según dstacó Space.com, esta teoría, conocida como “panspermia”, sugiere que partículas eyectadas de la Tierra tras colisiones con asteroides podrían haber viajado hasta el planeta vecino, llevando consigo microorganismos capaces de sobrevivir en condiciones extremas.
Según Emma Guinan, investigadora de la Escuela de Exploración de la Tierra y el Espacio de la Universidad Estatal de Arizona, y autora principal de un estudio presentado en la conferencia de la Unión Geofísica Americana de 2024, el equipo está indagando cuánta masa terrestre podría haber llegado a Venus y cuántas células podrían haber sido transportadas en ese proceso. “¿Qué pasaría si hubiera vida, pero se transfiriera desde la Tierra porque ya hay vida aquí?”, planteó Guinan.

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La panspermia: una teoría con raíces profundas
El concepto de panspermia no es nuevo en la red científica. Formalmente, se refiere a la transferencia de vida de un lugar del universo a otro, y algunos investigadores incluso sugirió que la vida en la Tierra podría haberse originado de esta forma, transportada desde el espacio profundo.
En este caso, la teoría se basa en la posibilidad de que organismos terrestres hayan sido expulsados al espacio tras impactos de asteroides y hayan llegado a Venus, un planeta que, a pesar de sus condiciones extremas, podría albergar espacios habitables en su atmósfera.
Según detalló Space.com, cuando un asteroide impacta contra un planeta, genera un fenómeno conocido como “material eyectado”, que consiste en partículas que son lanzadas al espacio debido a la fuerza del impacto. Estas partículas pueden viajar distancias importantes, y en el caso de la Tierra, podrían haber alcanzado Venus, ubicado a unos 41 millones de kilómetros (25,5 millones de millas) en su punto más cercano.
La hipótesis de la panspermia
El equipo de Guinan dedujo que aproximadamente mil millones de células podrían haber sido transferidas de la Tierra a la esfera venusina a lo largo de mil millones de años. Sin embargo, esto no señala que todas ellas hayan sobrevivido al viaje o que sean viables. “Ni siquiera estamos diciendo que esas células sobrevivan a la transferencia o que sobrevivan en la atmósfera, pero se están transfiriendo”, expresó la estudiosa.
La atmósfera de Venus: un posible refugio para la vida
Aunque la superficie de Venus es conocida por sus temperaturas extremas, que alcanzan los 475℃ (887℉), y su presión atmosférica aplastante, la atmósfera del planeta presenta una capa que podría ser más hospitalaria para la vida.
Según dijo Guinan, esta zona se encuentra entre los 45 y 60 kilómetros de altitud, donde las condiciones de temperatura y presión son similares a las de la superficie terrestre. Sin embargo, esta capa de nubes también presenta desafíos únicos. Está compuesta principalmente de ácido sulfúrico, lo que plantea dudas sobre si los microorganismos terrestres podrían sobrevivir en un entorno tan hostil.