Nana Chaichanhda es una madre soltera que vive en Stockton, California. Comparte un apartamento con sus tres hijos: un niño de 9 años, una niña de 8 y su pequeña Masailah, de solo 7 meses. Sasha, una perrita pitbull, completa la familia.

Una noche, Nana se encontraba sola con su pequeña, pues sus dos hijos mayores estaban con su padre. Todo estaba en orden, pero cuando decidió irse a dormir, sucedió algo inesperado. Sasha empezó a raspar la puerta trasera del apartamento de una forma muy inusual.

Al abrir la puerta, Nana notó que el apartamento de su vecino estaba incendiándose, y la perra comenzó a ladrar ruidosamente. Antes de que la madre pudiera darse cuenta de lo que pasaba, Sasha corrió hacia la habitación de la pequeña Masailah para hacer algo increíble.

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Según Nana, Sasha fue hasta donde dormía Masailah y empezó a jalarla por el pañal con los dientes para arrastrarla lejos del peligro. La madre tomó a la bebé para evitar que se lastimará y llamó a los bomberos mientras tocaba todas las puertas y ventanas de sus vecinos para alertarlos del peligro.

Finalmente, llegaron los bomberos, apagaron el fuego y nadie salió herido, pero lamentablemente el complejo de apartamentos tendrá que ser reparado y se mantendrá fuera de servicio durante al menos un año, por lo que Nana se verá obligada a mudarse con su familia.

A pesar de la tragedia del incendio, Nana sabe que cuenta con una amiga inseparable en Sasha, que demostró su amor por su familia y su disposición para arriesgarse por el bien de todos.

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Esta noticia choca con lo que siempre escuchamos de los pitbull, que tienen la mala fama de ser una de las razas más agresivas y violentas, pero esta historia demuestra que son tan capaces ser valientes y de mostrar su amor por su familia como cualquier otra raza de perros.

Fuentes:

ABC

Inside Edition