Ocurre que España decidirá si sacrifica a Wally, la ballena gris perdida en Mallorca. Se ha desviado por completo de la ruta y espacio natural donde están los alimentos y otros ejemplares de su especie.

También te puede interesar: Conoce la pileta flotante que construirán en medio del río en la ciudad de Nueva York

Desorientada en las islas del Mediterráneo español

La han bautizado con el nombre de Wally. Primero, fue vista en Ibiza y en otros lugares costeros. Finalmente, parece haberse quedado en los derredores de Mallorca. Cada vez más lenta y con dificultades para respirar.

¿Qué sucedió con el cetáceo? La ballena se desvió por el estrecho de Gibraltar. En vez de seguir con su grupo, se adentró en el Mediterráneo. Extraviada, se ha quedado perdida y no consigue salir de este lugar.

Ocurre que las ballenas son animales en peligro de extinción. La cacería y la destrucción de sus hábitats ha minimizado la cantidad de ejemplares de estos animales. Además, también el cambio climático las altera y hace pierdan rumbo.

Se cree que Wally está desorientada por el cambio climático

Este fenómeno afecta la biodiversidad en el medio ambiente. Además, altera los ecosistemas. Las ballenas, por ejemplo, se orientan por medio de la temperatura del agua. Cuando esta temperatura cambia, ellas se pierden.

Se cree que esto ha sucedido con Wally, quien está fuera de la ruta natural de los cetáceos. Ahora, se encuentra sola; lo cual es un agravante en animales sociales como las ballenas. Además, no tiene alimentos para mantenerse.

Esta ballena tiene 8 metros de largo y es un ejemplar joven. Se cree que tiene entre dos y tres años de edad. No obstante, su respiración es débil. Igualmente, se nota que su peso y talla no es la adecuada, ya que tiene desnutrición.

Han tratado de salvarla: alejarla de las playas para que no quede varada. También, tratar de sacarla fuera de Gibraltar. Pero no ha sido posible hacerla nadar, ya que está muy débil. No es capaz de desplazarse por largos kilómetros.

Van a decidir si van a sacrificarla

No es una decisión fácil. Empero, parece haber pocas chances de salvarla. Ella, por su cuenta, no es capaz de nadar hasta el pacífico con los demás ejemplares de su especie. Igualmente, no tiene los alimentos que necesita.

Se considera que no es justo que la ballena siga sufriendo. Además, no se sabe dónde moriría si se le deja libre. Por eso, se ha pensado que lo mejor es sacrificarla para terminar con esta situación.

También te puede interesar: La historia de la joven australiana que comenzó a hablar con acento irlandés luego de una cirugía

¿Es justo que los animales sufran por el cambio climático? ¡Claro que no! Por eso, los humanos debemos tomar conciencia. Casos como este no se deben repetir.

Fuente:

NGEN