En general, las personas de Leo son fácilmente reconocibles, ya que si hay algo que saben hacer es llamar la atención. Suelen ser el centro de las reuniones, y buscan constantemente hacerse ver. Disfrutan ser el Sol (por el cual están regidos) de su Universo.
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Aunque esto puede despertar en algunas personas admiración e inspiración, en otras puede generar rechazo, puesto que suelen parecer un poco arrogantes, soberbios o hedonistas.
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Otra forma fácil de reconocer a un Leonino es su carisma y energía. Al ser un signo de fuego al igual que Aries y Sagitario, son personas apasionadas e irradian su energía en todas direcciones. Suelen ser, por esta capacidad de iniciativa, personas muy emprendedoras y entusiastas. Les gusta el éxito y son muy determinados con lo que quieren en sus vidas.
Tienen, además, una fuerza muy notable. A menudo pueden parecer que se llevan el mundo por delante, pero no siempre es así. Además, si no trabajan su energía pueden llegar a ser impulsivos y testarudos.
Son, además, muy orgullosos y demandantes. Pero lo que nunca te faltará si estás con un leonino será una conversación honesta y directa. La lealtad es una de sus características más valiosas.
En las relaciones, los de Leo suelen ser confiables; sin embargo, su mayor debilidad es su pretensión de dominar y sobrellevar todas las situaciones a su antojo.
Eso sí: quizás en las relaciones los leoninos busquen ubicarse en el lugar de héroes o heroínas y traben pareja o amistad con alguien que necesita "ser salvado".
Aunque su personalidad es intensa y fuerte, su corazón es sensible. Por eso, si conoces a alguien de Leo tenle paciencia, cuando logres intimidad podrás alumbrarte y sentirte cómodo con el calor de su Sol interior.
Suelen ser más compatibles con los signos de: Géminis, Libra, Sagitario y Acuario.
En el plano laboral, son líderes naturales y siempre buscarán avanzar.
Su misión en la vida es llenar de energía y valor a quienes los rodean.
Fuentes: