En los últimos años han aumentado los casos documentados de partenogénesis, a menudo denominada "nacimiento virgen". Ahora, por primera vez, científicos han documentado el primer "parto virgen" en un cocodrilo, después de que observaran en 2018 una hembra solitaria mantenida en cautividad durante 16 años que puso huevos sin aparearse, con lo que el cocodrilo americano (Crocodylus acutus) se suma a la lista de especies conocidas que lo hacen.

Como ya se sabía que las aves se reproducían de este modo, la partenogénesis pasa a formar parte de un grupo de vertebrados conocidos como arcosaurios, lo que, según los investigadores del descubrimiento, quienes publicaron su estudio en la revista Biology Letters de la Royal Society, hace "muy probable" que los dinosaurios y los pterosaurios también podrían haber tenido esta capacidad inusual.

Partenogénesis: "Nacimiento virgen"

Los análisis genéticos del equipo de científicos estadounidenses revelaron que la hembra de cocodrilo en Costa Rica, en el Parque Reptilandia, produjo los huevos sin la intervención de un macho. O sea, los cocodrilos en desarrollo eran efectivamente partenógenos, compuestos únicamente de material genético de su madre.

Aunque los huevos no eclosionaron, tras tres meses de incubación, se trata de un descubrimiento sorprendente que los investigadores describieron como un caso de "partenogénesis facultativa".

"La partenogénesis facultativa es la producción de crías sin la contribución genética de una pareja, lo que a veces se denomina parto virgen", explicó a Newsweek el biólogo evolutivo Warren Booth, autor del estudio con el Instituto Politécnico y la Universidad Estatal de Virginia.

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Dinosaurios y pterosaurios

Según Science Alert, recientes descubrimientos sobre nacimientos vírgenes en cocodrilos y aves plantean la posibilidad de que sus antiguos antepasados, los dinosaurios, también pudieran haber poseído estas sorprendentes habilidades reproductivas.

Los cocodrilos y las aves pertenecen a un grupo de reptiles conocido como arcosaurios, el cual, en el pasado, también englobaba a los dinosaurios y a los reptiles voladores si retrocedemos en el árbol evolutivo.

"Este descubrimiento ofrece una visión tentadora de las posibles capacidades reproductivas de los parientes arcosaurios extintos de los cocodrilos y las aves, en particular los miembros de Pterosauria y Dinosauria", escribe el equipo de investigadores dirigido por Booth.

Partenogénesis en animales en libertad

Durante mucho tiempo se creía que la partenogénesis era exclusiva de animales cautivos mantenidos en aislamiento. Sin embargo, Booth ha señalado que en los últimos años se han descubierto cada vez más casos de partenogénesis en animales en libertad, como las serpientes cabeza de cobre y boca de algodón. Esto sugiere que los "nacimientos vírgenes" podrían ser más comunes en animales cautivos debido a la presencia de cuidadores que detectan la aparición de huevos inesperados.

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Booth también destaca que el mecanismo de reproducción asexual en serpientes, lagartos y aves es idéntico al de los cocodrilos. Por lo tanto, es poco probable que sea un rasgo que haya evolucionado de forma independiente en cada linaje, sino que se trata de una característica ancestral compartida por estos grupos.

Aunque el cocodrilo, en este caso, nació muerto, esto no significa que fuera así en todos los casos, según Booth.

"Tenemos numerosos registros en aves, serpientes y lagartos, que registran partenógenos naciendo, y sobreviviendo. Con este nuevo registro, apenas estamos empezando a comprender la importancia ecológica y evolutiva a largo plazo de este rasgo", afirma Booth.

Fuente: DW.