A medida que creces, vas conociendo a muchas personas. Primero es solo tu familia, luego tus primeros amigos, pero a lo largo de una vida terminas cruzándote con cientos de individuos. Muchos de ellos pasarán por tu vida sin dejar huella, y otros la marcarán para siempre.
Pero hay algunas personas que son sumamente especiales. Son aquellas que la vida nos envía con una misión: dejarnos un mensaje. Quizá se queden en tu vida o quizá simplemente lleguen en el momento y lugar oportunos para desaparecer poco después. De cualquier forma, te dejan un mensaje que queda en ti para siempre.
¿Tienes alguien en mente? Estas son las cinco personas que todos hemos tenido o tendremos en nuestra vida para transformarla.
1. El que te recuerda a dónde perteneces
Muchas veces perdemos el camino. O tal vez la vida nos lleva por lugares que no conocíamos, y luego nos sentimos perdidos. Evolucionar y cambiar es parte necesaria de la vida, pero a veces podemos terminar olvidando quiénes somos en realidad.
En general, cuando eso sucede, aparece una persona en tu vida que te recuerda a dónde perteneces. No son personas que vayan a estar contigo para siempre. En cambio, es aquel cuyo encuentro hace que abras los ojos y recuerdes quién solías ser.
Puede ser un viejo compañero de una actividad que te gustaba, o de una época de tu vida que tenías olvidada, y que reaparece en tu vida para recordarte quién eras en ese momento. ¡Abre los ojos!
2. Los que te ayudan a crecer
Estas personas suelen aparecer en tu vida como maestros o guías espirituales. También puede ser un colega que admires o una persona en cuya palabra confías. Pero, sobre todo, es esa persona que ve en ti algo que tú todavía no ves, y te anima a superarte.
Cuando sientes que no puedes hacer algo, o estás por comenzar un camino muy difícil, esa persona es una luz. Es la que te da las herramientas, pero porque sabe que tienes la capacidad de usarlas: solo te falta un poco de confianza.
Esas personas suelen ser en nuestra vida las que nos ayudan a llegar más alto y que siempre recordaremos con agradecimiento.
3. Los que te despiertan
A veces la vida nos lleva al letargo, a ponernos en piloto automático y dejar que las cosas sucedan sin nuestra intervención. No está todo mal, al contrario: la vida es cómoda y sin complicaciones. El problema es que de verdad no estás haciendo nada por crecer. ¿Vas a quedarte en esa comodidad toda la vida?
En esos momentos en los que parece que hemos llegado a un punto muerto, siempre aparece la persona que nos despierta, que nos invita a salir de nuestra zona de confort, que nos motiva a volver a tomar el mando de nuestra vida, aunque sea más arriesgado.
A veces tiene forma de amor, o de una amistad intensa. Puede ser también algún tipo de referente, un gurú, o incluso un jefe. La reconocerás porque con una palabra te hará ver el mundo de otra manera y ya nada volverá a ser igual.
4. Los que te dan una pista
Hay también muchas personas que no se quedan en tu vida. Son esas personas con las que coincides de manera ocasional y casi sin importancia. Sin embargo, algunas de ellas están allí para algo, para darte una “pista” de lo que necesitas.
No, no es la persona que te despierta, pero tal vez es la que dice una palabra que te deja pensando todo el día y que incluso mucho después seguirá resonando en tu cabeza. O esa que, con una simple mirada, te despierta una idea.
Son personas fugaces en cuanto a presencia física, pero muy importantes en cada momento de la vida.
5. Las que llegan para quedarse
Las personas fundamentales en la vida no llegan por casualidad, esas que te rodean, que te sostienen, en quienes confías. O esa persona que al principio creíste que no iba a ser tan importante, y hoy es la primera a la que recurres cuando necesitas un abrazo.
Hay personas que parece que te encuentras por casualidad, pero siempre están ahí, demostrándote que su lugar en tu vida era inmenso. ¡A esas personas es a las que más hay que cuidar!
¿Qué personas dejaron un mensaje importante en tu vida? ¡Comparte esta publicación con ellas!
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