Las selfies parecen algo completamente nuevo, pero en realidad son el resultado de un proceso que ha evolucionado a lo largo de los años. Desde los autorretratos de los grandesmaestros del arte, hasta los incómodos años al principio del siglo XXIen que las cámaras digitales se pusieron de moda, todo fue parte de un proceso que dio como resultado el mundoen el que las selfies comienzan a ser cosa de todos los días, además de un tema de estudio para psicólogos, psiquiatras yensayistas en todo el mundo.  

 

Por su popularidad, se han buscado establecer límites de cuándo sí y no hay que tomarse una selfie. Entre las que generaron más polémica, están las que se hacen en monumentos solemnes como el del holocausto en Alemania e incluso los que lo hacen con animales salvajes.  

Los últimos ya son parte de una importante campaña que busca eliminar estas fotografías, pues los animales sufren mucho para que los turistas se tomen fotografías con ellos. Ya sea en circos, templos o zonas ecológicas, el maltrato animal que hay detrás de estas selfies es inhumano y por eso nunca deberías de hacerlo.  

Muchos animales son alejados de sus madres

Los perezosos se han puesto de moda gracias a Internet. El animal es extremadamente lento y adorable, sobre todo cuando son bebés, pero la realidad es que estas pequeñas criaturas con las que muchos se toman selfies en reservas naturales viven cerca de seis meses debido a que son alejados de sus madres y no tienen los cuidados que tendrían en su vida salvaje.  

Sufren ansiedad, temor y hasta depresión

Si te das cuenta, la sonrisa siempre es de la persona que se toma la foto, pero los animales, aunque para unos parezcan indiferentes, pueden estar paralizados de miedo. Pasar de mano en mano mientras niños gritan y adultos forcejean por tomarlo en sus brazos causa muchos estragos en su salud emocional.  

Son drogados por seguridad

Hay templos de tigres y leones en Asia y África en la que puedes tomarte fotografías con algunos de los mamíferos más imponentes del mundo, pero para evitar accidentes, los animales no están domesticados, sino drogados. Viven una media vida entre la realidad y el estupor de las drogas, que nunca los hará agresivos, pero sí los mantendrá sedados de tal forma que cualquiera que viera a una persona así lo consideraría una tortura.  

Son golpeados

Algunos son golpeados para ser totalmente dóciles, un ejemplo son los elefantes que la gente monta en Tailandia. También hay otros que son maltratados, como las serpientes, que son sujetadas de tal manera que no se resistan a ser manipuladas, o los pequeños cocodrilos que viven con la boca amarrada para no morder a nadie, y muchas veces son transportadas todo el día en cajas de cartón demasiado pequeñas para su cuerpo.   

Viven en lugares horribles e insalubres

Esas criaturas siempre están enjauladas y viven en las peores condiciones. Muchas veces son limpiados antes del día de trabajo, pero después regresan a sus pequeños confinamientos. Recuerda que para ti puede ser un hermoso animal con el que sólo podrás tener una oportunidad de fotografiarte, pero para sus dueños no es más que un producto o herramienta que les genera dinero. Poco les importa su vida o su bienestar.  


Hay ONG’s que están trabajando para que Instagram elimine las fotografías con animales salvajes y disminuir su popularidad. Es en esa campaña en la que dicen que puedes tomarte una selfie con estos animales si te mantienes a una distancia segura (para él), es en su hábitat natural y se siente libre de moverse. Pero lamentablemente, muchas de las fotografías que vemos en las redes sociales no cumplen esas simples normas.