El arquitecto y ambientalista estadounidense Peter Bahouth construyó en un bosque de Atlanta una casa del árbol. La misma tiene tres habitaciones que están interconectadas por puentes colgantes.La inspiración de Bahouth surgió de los recuerdos de su infancia. Cuando tenía 6 años, era como todos los niños. Tenía una casa del árbol. Era tu territorio. Vos establecías las reglas. Nadie te decía qué hacer. La mía consistía sólo en una tabla y una rama. Pero me sentaba allí a pensar que si pudiera hacer mi propia casa del árbol, sería genial, explica el arquitecto.El hogar está compuesto por tres habitaciones. Cada una está montada sobre un árbol separado y se conectan entre sí por medio de puentes colgantes. Les dio el nombre de mente, cuerpo y alma. En la construcción, Bahouth priorizó causar el mínimo impacto ambiental posible y aprovechar al máximo las vistas. Para ello, no cortó ningún árbol y utilizó grandes ventanas.