Para algunas personas, las palabras "reciclaje" o "sustentabilidad" son aun sinónimos de austero, sobrio, incluso de algo precario o provisorio.
Pero cuando la imaginación no tiene límites, el reciclaje puede ser también lujo, comodidad y confort. Así lo demuestran los arquitectos encargados del Hotel Costa Verde en Costa Rica, quienes han creado una lujosa habitación ¡dentro del fuselaje de un viejo avión!
El avión fue rescatado del aeropuerto de San José de Costa Rica y data del año 1965.
La aeronave fue totalmente reacondicionada para convertirla en una habitación exótica y de lujo, cómoda y con una excelente vista.
El trabajo fue arduo, ya que el avión fue alzado a 15 metros de altura para que sus ocupantes puedan apreciar un maravilloso paisaje de mar y selva como si estuvieran viéndolo desde el aire.
La apariencia de la habitación por fuera es alucinante, ya que parece que el avión estuviera atravesado en medio de la frondosa vegetación, aunque intacto.
Pero, si por fuera ya se trata de una pieza arquitectónica increíble, sorprende aun más cuando nos asomamos adentro, y encontramos una habitación cálida, confortable y en completa consonancia con el hermoso paisaje que la rodea.
El clima cálido permitió que los arquitectos jugaran con la relación del espacio entre el exterior y el interior. Tanto las paredes como los pisos y los muebles están cubiertos de madera; y los techos son de tejas, excepto en las partes en las que el fuselaje funciona como tal.
Al contrario del ambiente frío y blanco que podemos imaginar cuando pensamos en un avión, la curiosa habitación del Hotel Costa Verde es puro confort y calidez.
Todos los detalles, incluso las terminaciones del baño, siguen las formas naturales del fuselaje y a la vez están diseñadas con ingenio para permitir que la naturaleza ingrese dentro del ambiente.
Se trata de un excelente ejemplo de reciclaje que desafía el prejuicio de que lo sustentable no puede ser bonito.
¿Te gustaría pasar una noche allí?