Si te gustan los gatos y las plantas, esta maceta te encantará. Además, aunque está tan bien terminada que no lo parece, ¡está hecha a partir de una botella plástica reciclada!
Anímate a hacer este fácil y creativo proyecto. También puedes aprender cómo hacer macetas geométricas modulares o macetas decoradas con piedras naturales.
- Botellas de plástico
- Pintura blanca brillante (sintética o casera, hecha por tí mismo)
- Fibrón resistente al agua (negro y rosa)
- Tijeras
- Cordón o hilo de algodón blanco
Procedimiento
1. En primer lugar, necesitas un molde, que puedes dibujar tú mismo o imprimir (puedes obtenerlo del blog Brudiy). Elige también tu botella: las más adecuadas son las que no tienen una base plana, sino con"patitas", como puedes ver en la fotografía.
2. Con un rotulador indeleble, marca el dibujo en la botella, y luego recórtalo. Entre la base y la punta de las orejas debes dejar alrededor de 12 centímetros.
3. Pinta la forma con pintura sintética o alguna otra pintura que se adhiera al plástico y sea brillante.
4. Dibuja con rotuladores o marcadores indelebles en color negro y rosado la cara del gato.
5. Si quieres colgar la maceta, realiza dos orificios a los costados y pasa un cordel.
6. Coloca grava en el fondo de la maceta, para facilitar el drenaje y que las raíces no se pudran. También puedes hacerle un orificio de drenaje o usar tu gato como portamacetas y colocar otro contenedor pequeño con buen drenaje dentro.
¡Coloca tu maceta gatuna donde más te guste!