A muchas personas les interesa construir sus propios muebles u objetos decorativos, y muchas veces estos proyectos tienen como protagonista a la madera.

Posiblemente, si eres uno de ellos, sepas que hay que escoger este material con conciencia porque la deforestación amenaza a nuestro planeta; y que lo ideal es reutilizar, siempre que sea posible, palets o muebles viejos.

Sin embargo, hay un aspecto que a veces no se tiene en cuenta en estos proyectos: la pintura también contamina. Si para los muebles reciclados utilizamos barnices y pinturas sintéticas, no estamos solucionando del todo las consecuencias ambientales. Las pinturas llevan componentes  tóxicos como el mercurio, y una sola gota de ellas puede contaminar litros de agua. 

Por eso, hacer tus propios barnices caseros, ya sea para pintar tus propios modelos o muebles que compres directamente en la carpintería, es una idea muy amigable con el ambiente.

A continuación, encontrarás 7 recetas de tinturas para madera que la dejarán de diferentes tonalidades y además te ayudarán a protegerla, ahorrando incluso mucho dinero.

La mayoría de las fórmulas para preparar barniz en casa requieren diferentes combinaciones de vinagres y metal. Este último puede venir de objetos sencillos que tienes en casa como esponjas de acero y clavos oxidados.

Materiales

Fórmula 1:  1 y 1/2 taza de vinagre blanco y una almohadilla de lana de acero (esponja de acero)

Fórmula 2: 1 y 1/2 taza de vinagre balsámico y una almohadilla de lana de acero (esponja de acero)

Fórmula 3: 1 y 1/2 taza de sidra de manzana y una almohadilla de lana de acero (esponja de acero)

Fórmula 4: 1 y 1/2 taza de vinagre blanco y un puñado de clavos oxidados

Fórmula 5: una caja de saquitos de té

Formula 6: una taza de granos de café

Fórmula 7: pintura acrílica y agua*

*No es una receta natural, pero más adelante podrás saber por qué en algunos casos la recomendamos.

Fórmulas 1, 2, 3 y 4:

1. Para hacer cualquiera de las primeras cuatro mezclas, debes combinar ambos ingredientes (o bien una capa fina de la esponja de lana de acero, o bien un puñado de clavos; y el líquido indicado) en un frasco de vidrio; y esperar a que el metal reaccione al ácido del vinagre.

2. La tapa del frasco no debe estar apretada y debe quedar algo de aire dentro para que el oxígeno ayude a la oxidación.

3. Deja reposar 24 horas y traspasa la mezcla de frasco para detener la reacción (o puedes sacar simplemente el metal de adentro).

4. Aplícalo sobre la madera, pero debes saber dos cosas: la reacción no es inmediata, suele tardar 10 minutos, aunque hay casos en los que la madera se oscurece al día siguiente; y el color de la mezcla no será exactamente el que quede en la madera, sino que deberás ir probando. En las fotos, puedes ver que la mezcla más oscura, la de vinagre balsámico, da un resultado más tenue que las demás. 

Fórmulas 5 y 6: 

Para teñir madera con té o café (aquí sí debes elegir el que prefieras por el color) deberás prepararlos como si fueras a tomarlos, pero en una concentración 4 veces mayor. Por ejemplo, si para una taza de agua utilizas un saquito de té, aquí deberías usar 4. Puedes usar 10 saquitos de té en un litro de agua. 

Fórmula 7:

Las recetas anteriores dan como resultado tonos marrones o grises. Los muebles quedarán muy bonitos y son las más recomendables para el ambiente. Sin embargo, en caso de que quieras teñir la madera de color, hay una opción algo más sustentable que pintar con barnices industriales. Puedes diluir unas gotas de pintura acrílica en bastante agua, y aplicar sobre la madera de la misma forma que los barnices anteriores.

Si bien la pintura acrílica no es del todo inocua, utilizar algunas gotas diluídas es más sustentable que pintar directamente con color, y más preferible que utilizar, por ejemplo, pintura sintética. El resultado es como el que puedes ver al final. Otra opción es hacer tus propias pinturas naturales.

Y tú, ¿de qué color quisieras teñir tus muebles de madera?