La actriz británica, Emilia Clarke, dio una entrevista al programa “Sunday Morning” de la CBS, en la que habló de su vida luego de sufrir dos graves aneurismas cerebrales. Según la Clínica Mayo, éstas se definen como “una protuberancia o abombamiento anormal en las paredes de un vaso sanguíneo. Un aneurisma se puede romper (reventar), lo que causa sangrado interno y, a menudo, la muerte”.
La artista de 35 años dijo que estos sucesos fueron en los años 2011 y 2013, respectivamente, justo cuando se encontraba dando vida a Daenerys Targaryen, la reina de los dragones, en “The Game of Thrones”. Afortunadamente pudo sobrevivir a ellas, pero quedó con serias secuelas.
Respecto a ello, manifestó:
“La cantidad de mi cerebro que ya no se puede usar… es notable que pueda hablar, a veces articuladamente, y vivir mi vida con total normalidad, sin absolutamente ninguna repercusión. Los accidentes cerebrovasculares, básicamente, tan pronto como cualquier parte de tu cerebro no recibe sangre por un segundo, desaparece. Y así, la sangre encuentra una ruta diferente para moverse, pero luego, cualquier parte que falte, desaparece”.
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La actriz sostiene que “pertenezco a la muy, muy, muy pequeña minoría de personas que pueden sobrevivir a eso”, y afirma que le causa gracia que le falte parte de su cerebro. Los aneurismas le provocaron vómitos recurrentes y un “dolor insoportable”.
Emilia confesó que su papel en Game of Thrones la salvó de su estado depresivo. “La primera vez fue difícil, con la segunda fue mucho más complejo mantenerme optimista. Definitivamente pasé por un período de estar… decaída, por decirlo suavemente”.
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“Vas al set e interpretas a un personaje rudo, caminas sobre el fuego, hablas con cientos de personas y se te pide que trabajes lo más duro que puedas. Eso se convirtió en lo que me salvó de considerar mi propia mortalidad”, afirmó.
Actualmente se encuentra protagonizando una adaptación teatral y asegura que puede hacerlo sin olvidar ninguna línea.
Luego de una cirugía en la que sanaron el aneurisma, pudo vivir su vida con relativa normalidad.
Fuente:
UPSOCL.