La sandía es una de las frutas más consumidas durante el verano debido a su gran aporte de agua y su dulce sabor. Cuanto más roja, más sabrosa, y su jugo es el diurético natural más tentador. 

Pero es frecuente que al comerla, además de la cáscara, se descarten las semillas de la sandía. Se cree que no pueden ser consumidas y se desconocen sus propiedades. Es por eso que a continuación te informaremos sobre algunos de los beneficios de las semillas de sandía.

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Beneficios de las semillas de sandía

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Cómo preparar una infusión con semillas de sandía

Tritura 40 semillas frescas de sandía y luego hiérvelas en dos litros de agua. Consume esta preparación durante los primeros dos días ya que es el período de tiempo en el que se mantiene en buen estado. La puedes tomar con la misma frecuencia que bebes agua y en cualquier momento del día. Además puedes consumirla a temperatura ambiente o conservarla en la heladera para beberla fresca. 

Esta infusión fácil de hacer te ayudará a regular la tensión arterial, a sentirte con más energía debido a que se trata de un isotónico natural, y a obstruir la degeneración de las células gracias a su poder antioxidante.

¿Qué estás esperando? Aprovecha todos los beneficios de las semillas de sandía y prueba esta sencilla receta casera.

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