El origen del cáncer comienza por crecimiento en forma descontrolada de las células en alguna parte del cuerpo, en este caso, se trata de la próstata. Por lo general, estado inicial los síntomas son casi imperceptibles, haciendo difícil su detección. Sin embargo, una vez que se conoce de su existencia se debe iniciar cuanto antes su tratamiento. Y aunque es uno de los cáncer más comunes en los hombres, si existe una prevención oportuna.
¿Qué es el cáncer de próstata?
Se define como el tipo de cáncer que se desarrolla en la próstata, una pequeña glándula en forma de nuez en los hombres. La cual se encarga de producir el líquido seminal que transporta y nutre el esperma. Este cáncer crece lentamente y suele limitarse inicialmente a la glándula prostática, donde puede que no cause daños graves.
Algunos tipo de cáncer de próstata pueden crecer muy lento, necesitando tratamiento mínimo. Mientras que otros son más agresivos y se pueden esparcir más rápidamente. Por lo que es necesario detectar a tiempo la enfermedad (cuando todavía está confinado a la glándula prostática) para que tenga una mejor oportunidad de tratamiento exitoso.
Causas
Se desconoce con exactitud que causa esta enfermedad, pero se sabe de forma general que es ocasionado por cambios en el ADN de una célula normal de la próstata.
El ADN es el químico que conforman los genes de una célula y que además controla sus funciones. Por ejemplo, hay ciertos genes que ayuda a las células a crecer, mantenerse vivas y hasta dividirse. Este tipo de gen suele reparar los errores del ADN y provocan que las células mueras en el momento oportuno. Cuando alguna de estas funciones comienzan a fallar y se genera un descontrol en su crecimiento, se originan las células cancerosas. Para el cáncer de próstata esta es la razón más clara de su aparición.
Síntomas
En su estado inicial, el cáncer de próstata tiene signos demasiado leves para notarse. Comúnmente, el mismo se detecta mediante un análisis del PSA o un DRE, a este proceso de le llama detección. En caso de sospechar la presencia de esta enfermedad en función a los análisis ya realizados se llevan a cabo más controles y pruebas para diagnosticarlo.
Cuando la enfermedad presenta síntomas y signos efectivamente notables, es porque se encuentra en un estado posterior. Estos incluyen:
- Problemas para orinar.
- Micción frecuente.
- Urgencia de orinar frecuentemente por la noche.
- Necesidad de hacer fuerza para vaciar la vejiga.
- Presencia de sangre en el semen o en la orina
- Aparición de disfunción eréctil.
- Molestia en la zona pélvica.
- Dolor o ardor al orinar.
- Dolor en los huesos.
- Molestias o dolor al estar sentado.
En algunas ocasiones, los hombres con cáncer de próstata no manifiestan ninguno de estos signos. Mientras que otras enfermedades de la próstata no cancerosas, como el aumento de su tamaño o la BPH pueden dar origen a síntomas similares.
Cuando el cáncer ya se ha dispersado fuera de la próstata, un hombre puede experimentar los siguientes síntomas:
- Hinchazón o acumulación de líquido en las piernas o los pies.
- Pérdida rápida de peso.
- Dolor en las caderas, la espalda, los muslos, u otros huesos.
- Fatiga.
- Cambio en los hábitos intestinales.
Metástasis
Las células de cancerígenas de la próstata pueden diseminarse a cualquier otra parte del cuerpo. En este contexto, la metástasis en el cáncer de próstata ocurre cuando las células se desprenden del tumor en la próstata. Trasladándose por el sistema linfático o el torrente sanguíneo, se trata del estado más grave de la enfermedad.
De forma común la metástasis de este cáncer puede ocurrir en los huesos, los ganglios linfáticos, el hígado, los pulmones y el cerebro.
Tratamiento
El tratamiento para el cáncer de próstata dependerá de su estado de gravedad. Cuando las células cancerígenas se desarrollan lentamente se recomienda monitoreo y suele tratarse de forma sencilla. Pero los casos avanzados se necesitan de radioterapias, quimioterapias, cirugías y otros tratamientos.
Existe distintas formas de tratar este cáncer, el paciente y el médico deciden cual es las más adecuada. Algunos de los tratamientos más comunes son:
- Vigilancia activa
Consiste en vigilar atentamente la enfermedad mediante pruebas regulares del antígeno prostático específico, tacto rectal y biopsias. Solo se inicia la administración de medicamentos si el cáncer muestra síntomas de crecimiento.
- Cirugía
Se realiza la prostatectomía, una operación donde los médicos extirpan la próstata.
- Radioterapia
Para este tratamiento se usa rayos X de alta energía (radiación) para destruir el cáncer. Existen dos tipos; Radioterapia externa y Radioterapia interna (braquirradioterapia). La primera utiliza una máquina externa al cuerpo para aplicar la radiación a las células cancerosas. Mientras que la segunda introduce pastillas radioactivas en el tumor canceroso o cerca del mismo para destruir las células malignas, esto mediante una cirugía.
Prevención
El riesgo de cáncer de próstata se puede disminuir de la siguiente manera:
Realizando ejercicio varios días a la semana
El ejercicio mejora el estado de salud general de las personas, ayudando a mantener el peso y mejorando el estado de ánimo. Algunos estudios evidencian que los hombres que no hacen ejercicio desarrollan niveles antígeno prostático específico más elevado.
Siguiendo una dieta saludable con frutas y vegetales
Es preciso evitar los alimentos con altos contenido de grasa y en su lugar aumentar el consumo de frutas y vegetales. Ya que estas aportan los nutrientes y vitaminas que el cuerpo necesita para estar en buena forma.
Manteniendo un peso saludable
De estar en un peso ideal, se debe mantener, pero si se tiene sobrepeso es necesario mejorar la dieta y hacer más ejercicio.
Consultando al médico
Los hombres que tengan alto riesgo de padecer la enfermedad pueden considerar tomar medicamentos para disminuir las posibilidades. Es de suma importancia el chequeo médico.
Pronóstico
El pronóstico de cáncer de próstata se refiere a una supervivencia global sin tener en cuenta la fase de la enfermedad, tipo histológico o la edad.
Según los datos más actualizados, la supervivencia de cáncer de próstata ha mejorado en las últimas décadas. El 48% de los casos diagnosticados resultan en tratamientos exitosos y aproximadamente un 84,6% de los pacientes que sufren la enfermedad sobreviven más de 5 años.