¿Alguna vez has sentido que estar un rato al lado de una persona te absorbe la energía? ¿Que te deja desanimado, cansado y abatido?
Si es así, seguramente has estado al lado de una persona tóxica. Aunque no hay una definición exacta y hay mucha controversia alrededor del tema, se puede definir a alguien tóxico como quien “sistemáticamente perturba a las personas que lo rodean, buscando impedir su bienestar”.
Seguramente no lo hagan a propósito, pero lo cierto es que cuando nos rodean nos hacen daño, impidiendo nuestro desarrollo y felicidad.
Por eso, es que a estas personas es mejor alejarlas de nuestra vida. Sin embargo, no siempre se puede: es posible que alguna forme parte de nuestra familia, sea un compañero de trabajo, o simplemente sea alguien a quien queremos mucho y no queremos lastimar.
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Es importante que aprendas cómo debes responder ante vínculos y personas tóxicas, para que no te hagan daño.
1. Entrena tu inteligencia emocional
Las personas tóxicas tienen impacto sobre ti porque logran transmitirte sentimientos negativos como el pesimismo y la victimización, y terminan sometiendo a tu cerebro a altos niveles de estrés.
Por eso, lo primero que debes hacer cuando estés con gente tóxica es aprender a desarrollar tu inteligencia emocional: no dejar que las palabras y acciones de otro te afecten directamente.
2. Detecta y evade
Tal vez no puedas eliminar por completo a la gente tóxica de tu vida, pero sí puedes evitar caer en sus trampas.
Por eso, lo principal es detectar a las personas con estas características. Una vez que te has dado cuenta que alguien de tu entorno es tóxico, aprende a detectar cuáles son los comportamientos con los que logra enredarte.
Las personas tóxicas siempre intentan llamar la atención. Puede ser que te busque a través de peleas, que discuta tus conocimientos, que remarque alguno de tus defectos o, simplemente, que se la pase a tu alrededor quejándose de todo.
Así que lo mejor que puedes hacer es lo siguiente: una vez descubierto qué es lo que esa persona tóxica hace para llamar tu atención, simplemente empieza a ignorarlo y a evitar esas situaciones. Si discute contigo, dale la razón. Si te provoca, sonríe y sigue con lo tuyo.
Verás cómo enseguida neutralizas sus efectos.
3. Evita pagar con la misma moneda
Los tóxicos se propagan, y la toxicidad de las personas también. Lo peor que puedes hacer ante gente tóxica es responderles, pagar con la misma moneda.
Sólo conseguirás que esta persona haya logrado el objetivo: te ha introducido en su red.
Igual no te preocupes, aunque es difícil, inocular el virus es posible. Pero requiere que tengas un poco de constancia y, sobre todo, que refuerces el punto número 1.
4. No confrontes pero marca el límite
Las personas tóxicas están buscando confrontar contigo, por eso reaccionar o ponerte a la defensiva no sirve con ellos.
Debes marcar las cosas que te molestan y te parecen mal, hacerle ver a la persona tóxica que has detectado su manera de actuar, y dejarle claro que no participarás en ese juego.
Marcar el límite y demostrar tu fuerza es una de las mejores maneras en las que puedes enfrentar a este tipo de personas sin caer en su juego.
5. Sé un espejo para ellos
Ante todo, y aunque estas personas te hagan daño, recuerda que son personas y que merecen ser tratadas como a ti te gusta que te traten. Por eso, ante la agresividad responde con compasión y ante las críticas con aceptación.
La mayoría de las personas tóxicas no son malas; simplemente tienen problemas para relacionarse con otros asertivamente. Por eso, mantener tu actitud impertérrita ante sus embates no sólo te hará sentir bien a ti: también es posible que ayudes al otro a crecer y superarse.
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