Bien es sabido que nuestro grupo sanguíneo determina quiénes pueden hacernos transfusiones de sangre y quiénes no.



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Sin embargo, son menos los que saben que nuestro grupo sanguíneo, por sus características únicas, también influye en nuestra nutrición, la pérdida de peso, el riesgo de sufrir enfermedades e incluso nuestra personalidad.

Estas son 10 cosas que deberías saber sobre tu grupo sangre.

Nuestro tipo de sangre influye en las reacciones químicas relacionadas con la digestión. Por esta razón, las personas con sangre tipo O deben consumir alimentos ricos en proteínas, mientras que las de tipo A son más compatibles con los vegetales.

Las de tipo B deben evitar el pollo y comer más carne roja. Por último, las de tipo AB se benefician de la comida de mar y la carne magra. Estos dos tipos de sangre tienen que ver con nuestros antepasados cazadores, así que si intentan ser vegetarianos es posible que les cueste más.

Por la distinta constitución de los antígenos en los glóbulos rojos de cada tipo de sangre, algunos grupos sanguíneos son más propensos o resistentes a ciertas enfermedades que a otras.

No quiere decir que ciertos grupos tienen asegurado sufrir una enfermedad o son inmunes a otras, sino que son más o menos propensos por naturaleza.

Las personas del grupo O son extrovertidas, creativas, sociales y confiadas. Por otro lado, las del grupo AB son de confianza, tímidos, responsables y les gusta cuidar de los demás.

Las del grupo B suelen ser dedicarse a sus objetivos, son fuertes e independientes. Por último, los miembros del grupo A son pacíficos, de mentalidad artística y confiables.

Algunos expertos afirman que las mujeres de ciertos grupos sanguíneos quedan embarazadas con mayor facilidad que otras. Por otro lado, las mujeres del grupo AB producen una cantidad sustancialmente menor de la hormona folículo estimulante, que contribuye con la concepción. Y todas las que tengan "RH negativo" necesitan avisar a su médico, porque si el bebé es RH positivo, el cuerpo genera anticuerpos contra él.

Las personas del grupo A producen la “hormona del estrés”, el cortisol, en mayor proporción que los demás grupos, lo que los hace más susceptibles al estrés. Los miembros del grupo O, por su parte, tienen niveles mayores de adrenalina y les cuesta más tiempo recuperarse de situaciones estresantes.

Nuestro tipo de sangre influye en la producción de antígenos, que son carbohidratos que están unidos a proteínas o lípidos, y son los encargados de la respuesta inmune de nuestros cuerpos.

Algunas personas parecen “superdotadas” con un abdomen libre de grasa o más fácil de tonificar. Las personas del grupo A, por la facilidad con la que digieren los carbohidratos poseen menos grasa abdominal que el promedio.

Los del grupo O son el caso opuesto. Su metabolismo les hace más propensos a la acumulación de grasa en el abdomen.

Algunos grupos sanguíneos son incompatibles y los miembros de estos grupos tienen que saberlo antes de tener hijos juntos. Tiene más que ver con el factor RH que con el grupo.

Debido a su propensión al estrés, las personas del grupo A deberían practicar ejercicios relajantes y calmantes como yoga o sesiones de meditación.

Las personas del grupo B, por su personalidad, suelen realizar ejercicios que equilibran cuerpo y espíritu, como tenis, escalada y artes marciales.

Los expertos recomiendan que siempre lleves información personal contigo, como nombre y apellidos, dirección, número de contacto y el tipo de sangre. En caso de una emergencia en la que una transfusión sea necesaria, esto puede agilizar el proceso, ¡incluso salvarte la vida!

Como puedes ver, tu grupo de sangre puede decir mucho sobre ti, tu personalidad y en algunos casos condicionar algunos aspectos de tu vida. Con estos conocimientos puedes informarte sobre las características de tu grupo para el beneficio de estilo y calidad de vida.