Las fotos de las calles inundadas en Porto Alegre, capital de la región de Río Grande del Sur, se divulgaron en Internet. Esa catástrofe climática en Brasil parece tener varias explicaciones, de las cuales trataremos de dar tres respuestas.
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Las inundaciones en el estado brasileño de Río Grande del Sur
Durante el mes de abril de 2024, las lluvias se desbordaron en este territorio brasileño. Muchos poblados resultaron afectados, siendo particularmente dañada la ciudad de Porto Alegre. Esta última se encuentra en la conjunción de cinco ríos.
Las autoridades informaron de más de 150 fallecidos, más de 100 desaparecidos y 700 mil personas que tuvieron de mudarse a refugios. Fueron evacuadas más de 330 mil personas de Porto Alegre, en una emergencia gigantesca.
¿Por qué sucedió esta catástrofe climática?
Se habla del cambio climático, así como de fallas en los sistemas de drenajes y alcantarillados de la ciudad. La gran cantidad de basura en el ríos Guaíba y Jacuí es una factor que se considera causó que estos cauces de aguas se colapsaran.
Una vez terminadas las lluvias, cuando el nivel de agua descendió en las calles, las autoridades procedieron a limpiar toneladas de desperdicios que quedaron en las calles de Porto Alegre. La ciudad aún se recupera del desastre.
Varias explicaciones se han dado acerca de esta situación. Al parecer, no solo son “causas naturales” las culpables de la situación. Estas explicaciones son necesarias para prevenir una nueva catastrofe en años siguientes.
1. Sistemas de alerta realistas
El Cemaden advirtió precipitaciones de 22 milímetros, pero en asentamiento como Bertioga y San Sebastián cayó el triple de agua. A su vez, las festividades del carnaval parece que tuvieron más atención que la atención a las alertas.
Estos sistemas de alerta tienen otro detalle: no se difunden en favelas y comunidades de bajos recursos, que son las más vulnerables. Se toman previsiones en las zonas formales de la ciudad, pero los espacios informales no reciben llamado de emergencia.
2. La preparación ante las emergencias
Tan solo un 17% de los municipios poseen sistemas de alertas, básicamente sirenas para que la gente se refugie al escucharlas. Pero: ¿a dónde refugiarse? No hay información al respecto, ni tampoco refugios claramente identificados.
Durante las inundaciones, hubo mucha improvisación. Primero, desalojos en desbandada y después no se sabía qué hacer con los afectados. Los centros de salud tampoco supieron dar respuestas oportunidades ante la calamidad entre la población.
3. La contaminación de los ríos
Los ríos ríos Guaíba y Jacuí son los vertederos de Porto Alegre. Sus cauces están atestados de basura urbana. De hecho, junto con el agua de estos cauces, también hubo toneladas de desperdicios que llenaron la ciudad en plenas inundaciones.
Se dice que tanta basura en los río evitó que el exceso de agua fluyera hacia el mar. Tal vez, con estos ríos más despejados la situación hubiese sido distinta. Pero, el Guaíba y Jacuí llevaban décadas acumulando desperdicios.
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¿Qué se puede deducir de todo lo anterior? Al parecer, las inundaciones en Brasil llegaron a nivel de catástrofe por una conjunción de circunstancias. Es cierto las lluvias fueron intensas, pero la situación se complicó por la suma de otros factores.
Fuente:
redaccion.com