Hoy existe en todo el mundo una gran cantidad de observadores de aves, ornitólogos y conservacionistas recogiendo datos sobre ellas y colaborando con el conocimiento científico. Esta abundante información asoma un panorama sumamente preocupante: una de cada ocho especies de aves está en peligro de extinción.
Entre las principales amenazas que enfrentan las aves, se encuentran la expansión e intensificación de la agricultura, la tala insostenible de árboles, las especies exóticas invasoras, la sobreexplotación y el cambio climático. También influye la captura incidental en la pesca comercial al igual que el creciente desarrollo urbano, la mayor frecuencia e intensidad de los incendios forestales y la producción energética mal planificada.
Cuidando a una especie en peligro de desaparecer
En la Argentina una de las especies más amenazadas de los pastizales es el Tordo Amarillo. Su población ha disminuido drásticamente y se calcula que actualmente solo quedan alrededor de 1000 ejemplares.
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Los motivos de esta disminución son varios: la pérdida de hábitat, causada por la intensificación de la actividad agropecuaria; las prácticas intensivas de ganadería, que favorecen el aumento de la población del Tordo Renegrido (especie que parasita en forma desmedida los nidos de Tordo Amarillo) y el tráfico de fauna: el Tordo Amarillo es también un ave preciada para su captura y cautiverio.
Pero desde el año 2015 Aves Argentinas, junto al CONICET y otras organizaciones se unieron para conocer mejor a la especie y concientizar a la población para preservar a una especie única.
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