Las escuelas ecológicas nacen para ofrecer nuevos modelos de pensamiento y articulación social, económica y productiva. El objetivo es acercarle a los chicos la posibilidad de ser sustentables a través del juego, trabajando con curiosidad, compromiso, creatividad y conciencia.
Algunas de las características de una escuela ecológica o sustentable son: tener menor consumo de energía, menos residuos (gracias a la correcta separación de basura y reutilización de materiales), ahorro de agua, bienestar entre los miembros de la comunidad escolar, y en alguna parte o en su totalidad, estar construida con materiales reciclados.
Ejemplos en América Latina
En Mar chiquita (Provincia de Buenos Aires) se inauguró hace un año la primera escuela sustentable de Argentina. Fue fabricada con 25 toneladas de materiales reciclados, como cubiertas de autos, latas, botellas y cartón junto con materiales tradicionales.
Allí se recolecta el agua de lluvia para reutilizarla al interior del establecimiento. Además, los paneles fotovoltaicos llevan a cero el costo energético con temperaturas promedio de entre 18 y 25 grados. Alumnos y docentes trabajan en la producción orgánica de alimentos a través de huertas de interior y exterior. El proyecto, que estuvo a cargo del arquitecto estadounidense Michael Reynolds, demoró 45 días.
En Uruguay, también se construyó una escuela sostenible. Se edificó usando 2.000 neumáticos, 5.000 botellas de vidrio, 2.000 m2 de cartón y 8.000 latas. Aquí también se genera energía con paneles fotovoltaicos y molinos de viento. Esta escuela que se fundó en 2016 queda a 80 kilómetros de Montevideo, la capital del país, en la localidad de Jaureguiberry.
También hay muchos proyectos que están comenzando, y que buscan generar un cambio, un desafío. Los chicos del IPEM 338 de barrio Marqués Anexo, en la provincia argentina de Córdoba, se presentaron a la Feria de Ciencias con un proyecto ambicioso: construir edificios, espacios verdes y alimentar a todos los hogares con energía eólica. Esta escuela, que sueña con rodearse de un barrio sustentable, fue reconocida y obtuvo una mención. Ahora buscarán apoyo del Estado para llevar a cabo la idea.
Las eco escuelas son un fenómeno en crecimiento que conciencian a niños y jóvenes a comprometerse con el ambiente, ofreciéndoles un entorno acorde, información y oportunidades para involucrarse activamente a través de programas, y políticas de gestión ambiental que se trabajan dentro del aula. Son espacios necesarios, que seguirán naciendo para que cada vez más niños, familias y docentes se involucren y ejerciten su participación ciudadana.