Para tener un jardín como siempre quisiste y disfrutar de toda su belleza, no es necesario que seas un experto ni que adquieras productos sintéticos que podrían afectar tu salud y la de tus plantas. Muchas veces lo más efectivo se encuentra más cerca de lo que imaginas.
El café, además de tener un inconfundible aroma, puede serte muy útil al momento de cuidar tu jardín. Además, tiene la ventaja de ser ecológico y, por ende, estar libre de sustancias químicas como otros productos fertilizantes que se comercializan.
Al ser rico en nitrógeno, magnesio y potasio, el café resulta ideal para utilizar como fertilizante natural. Pero debes tener en cuenta que solo será adecuado para las plantas que requieran de un suelo ácido para su desarrollo, como las rosas, los arándanos, las azaleas o las hortensias. El café las ayudará a incrementar la floración y promover su crecimiento.
En esta nota aprenderás cómo usar café para mejorar tu jardín o huerto, una idea económica que además de ahorrar, te ayudará a cuidar el medio ambiente.
¿Cuáles son las ventajas del uso de café en el jardín?
Nutre el suelo y las plantas
El nitrógeno es uno de los nutrientes primarios de las plantas, por eso su deficiencia implica que éstas crezcan más lentamente o sean más pequeñas de lo normal. El café molido contiene este elemento casi en el mismo porcentaje que el pasto cortado, y favorece el acercamiento de lombrices, manteniendo el suelo fértil.
Además, al nitrogenar la tierra ayudará al crecimiento de las plantas y, en el caso del huerto, al de sus frutos.
Ayuda a combatir las plagas
Gracias a su acidez, el café funcionará como pesticida natural que te ayudará a evitar algunas plagas como babosas, gusanos o caracoles. Además, la acidez se irá neutralizando a medida que el café se descompone.
No obstaculiza el drenaje
La textura del café molido, al ser ligera y granulada, permitirá un buen drenaje natural del agua.
¿Cómo utilizarlo?
Si no sabes qué hacer con el café que sobra de tus infusiones, ¡ahora le has encontrado una gran utilidad! Guárdalo para que pueda servirte para favorecer el crecimiento de tus plantas. También puedes conocer otros usos creativos para los restos de café.
Para aplicarlo, espolvoréalo cerca de las plantas, especialmente a su alrededor. Incluso puedes mezclarlo con agua y dejarlo reposar durante la noche. El resultado será un fertilizante natural líquido que funcionará como abono orgánico para aplicar directamente en tallos y hojas.
También puedes enterrar ¾ de taza de restos de café cerca de las raíces; repitiendo esto una vez por mes. Ten cuidado de no excederte, porque incrementarás mucho la acidez de la tierra.
¿Cómo plantar café en tu hogar?
Si te entusiasmaron estos usos del café, puede que estés interesado por plantarlo en tu propia casa.
1. Consigue semillas de café y hazlas germinar colocándolas en agua durante 24 horas. Siembra la semilla a 2 ó 3 cm de profundidad y tápala con arena. Tardará en germinar aproximadamente 2 meses. También puedes adquirir la planta ya germinada.
2. Coloca las semillas germinadas en tierra porosa a una profundidad de 4 centímetros. La planta deberá tener siempre una temperatura de alrededor de 25ºC.
3. Riega de manera generosa, pero no excesiva.
Pronto tendrás tu planta de café, que podrás colocar dentro de tu hogar o en tu jardín para disfrutar de su belleza y aroma. Cuando las frutos tengan un color rojo, quítales la pulpa y déjalos secar dos o tres días al sol para luego tostar los granos, molerlos y disfrutar de esta bebida y de sus múltiples usos.
Conoce además cómo afectará el cambio climático a la producción de café en el mundo y comienza hoy a practicar una jardinería más sostenible.