Tener tu propia huerta siempre es muy divertido y gratificante, aunque comiences simplemente con una o dos variedades en un maceta.

Si no tienes demasiado espacio, puedes probar con alternativas como cultivar plantas que vuelven a crecer solo en agua, o incluso atreverte a ¡cultivar champiñones en el hogar!

Para sumar a tu pequeña huerta, esta idea es muy original: puedes aprender cómo plantar tomates ¡que crecen de cabeza! 

El tomate es una planta arbustiva que puede crecer en forma recta, semi-recta o rastrera. Por eso, no hay problema en hacer que crezca colgada y orientada hacia abajo.

La época ideal para sembrarlo es la primavera, ya que necesita calor para germinar. Su ciclo es anual, es decir que cosecharemos una vez por año. Si los tendremos en interior o en un invernadero, podemos probar sembrarlos antes. 

En este caso, trasplantaremos una planta que ya comenzó a crecer, por eso la época no será tan importante.

- Una botella de dos litros vacía

- Tierra fértil

- Un filtro de café

- Tijeras

- Alambre y pinzas

- Varilla de madera o palito de brochette

- Una planta de tomate pequeña, lista para trasplantar

Procedimiento

1. En primer lugar, debes conseguir una botella de dos litros vacía y lavarla muy bien. 

2. Luego, corta su base como puedes ver en la imagen, separándola en dos partes.

3. Invierte la parte de abajo de la botella y prueba que encaje cómodamente en la parte superior. 

4. Con un tornillo caliente o similar, realiza una perforación en ambas partes a la vez (guíate por la fotografía).

5. Perfora la base de la botella con el tornillo, para que luego puedas regar a través de ella y el agua caiga gota a gota.

6. Una vez que tengas preparadas ambas partes de la botella, sepáralas y resérvalas.

7. Quita con cuidado tu planta o plantín de la maceta en la cual lo tenías, dejando la tierra que cubre sus raíces.

8. Pasa la planta entera a través del filtro de café, por el agujero. Envuelve solo la parte de tierra que cubre las raíces.

9. Con mucho cuidado, coloca la planta invertida, dentro de la botella, haciéndola pasar por el pico. Ten mucho cuidado de que no se dañe. 

10. Invierte la botella, coloca en la parte libre la base perforada, y une las piezas atravesando una varilla de madera.

11. Sujeta la maceta con un alambre amarrado a la varilla, y ¡cuélgala donde quieras!

El tomate necesita mucho sol para crecer. Coloca la planta cerca de una ventana, o mejor, ¡al aire libre! Para regarlas, simplemente llena el cuenco superior de tu maceta colgante, y el agua irá cayendo de a una gota por vez. 

Si quieres que quede más estético, puedes cubrir la botella con una lona o tela, o con lo que más te guste. Otro sistema de plantado invertido permite colocar, en la parte de arriba de la maceta, plantas florales. 

¡Puedes adaptarlo como más te guste!