El Pantanal, el humedal más extenso del planeta y que Brasil comparte con Bolivia y Paraguay, se está secando por la degradación de su suelo, según un estudio realizado por la iniciativa Mapbiomas recién divulgado. y que confirma la tendencia que se había advertido en años anteriores.
Datos obtenidos a partir del análisis de imágenes satelitales entre 1985 y 2021 revelaron que el área húmeda del Pantanal fue de 1,6 millones de hectáreas el año pasado, un 76% menor que la registrada 37 años atrás.
La superficie de agua en el Pantanal, en igual período, pasó de 2,7 millones de hectáreas en 1985, a 500.000 en 2021. De acuerdo con los expertos, la degradación del suelo es la responsable directa del problema.
Mientras que en 1985 los campos inundados en el Pantanal ocupaban cuatro millones de hectáreas, para 2021 el área se redujo casi a la cuarta parte (1,1 millones), entretanto, las actividades agrícolas pasaron de 600.000 hectáreas a 2,8 millones, en la misma comparativa.
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Factores locales y externos
De acuerdo con Eduardo Reis Rosa, experto de Mapbiomas, el Pantanal sufre «múltiples y simultáneos» factores de degradación local, regional y nacional. El análisis puede consultarse en el informe recién presentado por entidad.
A nivel local se puede ver con las invasiones al área de la meseta, que están afectando la calidad y la cantidad de agua; y con la transformación de áreas naturales en «pastizales exóticos» formados con especies foráneas.
Este tipo de pasto, que se reproduce velozmente sustituyendo la vegetación nativa, llegó al bioma en los años 80 de manos de hacendados que vieron con esta especie la opción de convertir zonas húmedas en pastizales, pero que desconocían que era dañina para el ganado y para la vida subacuática del Pantanal.
El avance de las represas y drenajes artificiales que comprometen el flujo de agua en las regiones aledañas al bioma también impactan en la degradación del suelo del Pantanal, así como las irregularidades en el régimen de lluvias, cada vez más frecuentes por la creciente deforestación de la Amazonía.
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Los incendios también tienen una fuerte incidencia en la degradación del suelo, pues dificultan la recuperación natural del Pantanal.
Solo las llamas que invadieron al Pantanal en 2020, consideradas las más graves de su historia, devastaron el 26% de la superficie del bioma.
Con unos 250.000 kilómetros cuadrados de extensión, de los cuales cerca del 60% está en territorio brasileño, el Pantanal es reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y considerado uno de los ecosistemas más ricos del mundo en biodiversidad de flora y fauna, con cerca de 600 especies de aves, 124 de mamíferos, 80 de reptiles y 60 de anfibios.
Con informacion de la Agencia EFE.