Las nueces ofrecen maravillosas propiedades para la salud, igual que otros frutos secos, como los anacardos (también llamados castañas de cajú). El problema es que no siempre sabemos cómo incorporar ese tipo de alimentos en nuestra vida cotidiana.
Para ayudarte en este proceso, tener recetas livianas, muy fáciles de preparar y deliciosas puede ser tu salvación. En este caso, te contaremos cómo hacer una salsa de nueces y anacardos completamente vegana para agregar a cualquier comida: pasta, risotto, tartas... ¡Lo que más te guste!
Propiedades de la salsa
La salsa que te proponemos hacer tiene muchos beneficios. En primer lugar, porque las nueces son una importante fuente grasas saludables y aportan gran cantidad de Omega-3, un ácido graso muy bueno y que pocos alimentos vegetales poseen en buena proporción. En conjunto, favorecen la salud del corazón y el cerebro. Además, las nueces tienen un fuerte componente antioxidante, por su alto contenido en vitamina E.
Por su lado, los anacardos también son excelentes para incorporar a la dieta. Por un lado, porque tienen una alta proporción de proteína (4,6 en 30 gramos), lo cual es perfecto para dietas veganas. Además, tienen la proporción ideal de grasas, para ser saludables.
También son ricos en cobre y el magnesio, dos minerales fundamentales en la alimentación y que suelen escasear en las dietas de la mayoría de las personas.
Todo eso, sumado al resto de los ingredientes súper naturales, hacen que esta salsa de nueces y anacardos sea una excelente propuesta para una dieta saludable.
Receta
Ingredientes
- 100 grs de anacardos
- 100 grs de nueces
- 1/2 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1/2 taza de leche vegetal (opcional, agua de remojo de los anacardos)
- 1/2 taza de aceite de oliva
- Sal y pimienta a gusto
Preparación
Los anacardos necesitan al menos cinco horas de remojo, así que lo primero que tendrás que hacer será colocarlos en agua fría y dejarlos reposar.
Las nueces, a su vez, se hierven. Pon agua al fuego y cuando llegue al punto de ebullición, incorpora las nueces y deja que se cuezan por cinco minutos. Luego retira y cuela. Cuando estén frías, córtalas en pedacitos.
Por otro lado, pica la cebolla y el ajo. No es necesario que lo hagas de forma muy fina, puesto que luego se incorporará a la procesadora. Luego, saltea los vegetales hasta que la cebolla esté tierna. Cuida que el ajo no se queme.
Ahora, incorpora a la procesadora los vegetales, las nueces y anacardos, la leche y dos cucharadas de aceite de oliva, sal y pimienta y comienza a procesar hasta alcanzar una consistencia cremosa.
Sigue agregando aceite de oliva y leche hasta que alcances la consistencia deseada. Si no tienes leche vegetal, puedes utilizar el agua de remojo de los anacardos.
¡Ya tienes tu salsa lista! Puedes comerla como más te guste. Si la prefieres caliente, la recomendación es que siempre la pongas a fuego bajo, porque se quema fácilmente.
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Fuentes: