Una peligrosa enfermedad en el caribe que está atacando a las corales del archipiélago de Bahamas pone en peligro el equilibrio del ecosistema marino. Según los expertos La afección se extiende por la región a una velocidad de 55 metros por día, matando a un gran número de especies en tiempo récord.
La enfermedad conocida como la Enfermedad de Pérdida de Tejido de Coral Pétro (SCTLD) está atacando a corales a gran velocidad, según lo informaron las autoridades de las Bahamas. Y no se ha quedado sólo allí, la afección se ha extendido por los arrecifes de las islas Gran Bahama, Nueva Providencia y Eleuthera Norte. Generando una gran preocupación por las pérdidas de corales y el equilibrio del ecosistema marino.
Perder los arrecifes de coral tendría un profundo impacto en el ecosistema que depende de ellos.
¿Cómo inicio la enfermedad?
La evidencia apunta a que la afección que padecen las corales comenzó a propagarse desde el 2014 frente a las costas de Florida. No obstante, el primer caso confirmado de brote de SCTLD en las Bahamas, no llegó hasta marzo de 2020, cuando científicos del PIMS confirmaron el brote. Lo trágico fue que, para aquel momento, la SCTLD ya había matado a un gran volumen de coral, incluidas algunas especies en peligro de extinción.
El Programa de Evaluación Rápida de Arrecifes del Atlántico y el Golfo (AGRRA), indicó que aún desconocen las causas que originaron la enfermedad. Pero se sabe que afecta a más de 20 especies de corales.
La SCTLD se propaga rápidamente lo que ocasiona que alcance grandes territorios en poco tiempo, poniendo en peligro los grandes arrecifes de coral. Desde el primer brote de 2014 en Florida, se ha confirmado presencia en Jamaica, México, República Dominicana, Belice, Países Bajos, Puerto Rico y Gran Bahama.
Para la facilidad del monitoreo de la enfermedad, los expertos han creado un mapa interactivo que da seguimiento a los corales enfermos. Muestra en tiempo real la propagación de la enfermedad.
El posible tratamiento
Un reciente estudio da esperanza para la para la conservación de los corales que están enfermando. El descubrimiento sugiere que la SCTLD puede ser tratada mediante antibiótico suministrado con altas tasas de éxito.
En Florida, ya se ha comenzado a administrar de forma exitosa.
Una vez que el PIMS reciba la autorización del gobierno de las Bahamas, comenzará la administración de tratamiento para salvar a las especies de aquella región. Si embargo, los científicos se enfrentan a una triste encrucijada para decidir cuáles regiones de corales recibirán tratamiento. Ya que no contarán con los recursos suficientes para salvar a todas las poblaciones enfermas.
“La única limitación es que solo podemos tratar una cantidad determinada de corales. No podemos decir que vamos a tratar todos y cada uno de los corales porque no solo resulta caro, sino que también requiere mucha mano de obra”, explica Krista Sherman científica del PIMS.