Llevar adelante acciones que combatan la crisis climática actual es tarea de todos: personas, entidades gubernamentales y organizaciones. En los últimos años, han sido muchos los emprendimientos y las empresas que han decidido dar un giro sostenible y hacer su aporte al respecto. Esto se traduce en un impacto positivo múltiple.
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empresas sostenibles: ¿qué son y cuáles son sus objetivos?
Una organización sostenible es aquella que, a través de sus actividades, busca contribuir al bienestar de la sociedad y el ambiente. Sus valores van de la mano con la optimización de los recursos. Por ello, su huella positiva es fundamental para construir un mundo mejor.
Son cada vez más los emprendimientos y las empresas que apuestan por el desarrollo sostenible. De allí, surge el concepto de Responsabilidad Social Corporativa: la responsabilidad que cada una de ellas tiene con el ambiente en el que se desenvuelve y con la sociedad de la que forma parte.
Esto beneficia tanto al negocio como al entorno, ya que sus decisiones velan por el bienestar de este último. Un emprendimiento o empresa sostenible busca crear un valor a corto, mediano y largo plazo. Es decir, no sólo actúa pensando en el presente, sino también en las generaciones futuras.
su aporte al consumo responsable y a la economía circular
Las organizaciones sostenibles buscan disminuir su huella de carbono, adaptándose a las necesidades del ambiente a través de los años.
Esto es compatible con la economía circular, un modelo que tiene como objetivo generar menos residuos y emisiones de CO2.
Pero, ¿cómo identificar a aquellas ¡empresas que siguen esta premisa? Quizás hayas oído hablar sobre organizaciones que recuperan y utilizan materiales reciclados en su producción, usan conscientemente los recursos o fomentan el progreso de pequeñas comunidades. Pues, de esto se trata, no sólo la economía circular, sino también la sostenibilidad en una empresa.
Esto juega un papel clave en el modelo económico circular. También en el consumo responsable, ya que permite que las personas accedan a productos y servicios funcionales al bienestar de la comunidad y el planeta. Esto es sinónimo de beneficios en la economía, la sociedad y el ambiente.
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Es importante que el consumidor sepa detectar cuándo hay greenwashing. Este es el "marketing verde" que intenta promover la idea de que una empresa es sostenible, cuando realmente no lo es.
Tanto las empresas sostenibles como el consumo responsable por parte de las personas son un combo fundamental para combatir la crisis climática. De ahí, la importancia de que el desarrollo sostenible y los valores relacionados con la sustentabilidad estén en la agenda de las organizaciones.