¿Qué es el tráfico ilegal de fauna silvestre?
Empecemos por definirlo: es la extracción de especies silvestres de la naturaleza (vivas, productos o subproductos) para ser comercializadas de manera ilegal. Con productos nos referimos a derivados directos como las pieles, huesos, plumas o cornamentas, siendo los subproductos aquellos que han sido manufacturados de algún modo, como por ejemplo una cartera, un tapado o el mango de una navaja.
El destino de los ejemplares traficados es principalmente como mascotas, sobre todo a nivel local (comercio interno). A nivel internacional, nos encontramos con colecciones privadas, taxidermia, industria de cueros y pieles, trofeos de caza deportiva; circos; medicina tradicional y en ocasiones investigación científica no regulada.
El circuito: primero hay una captura en la naturaleza, normalmente por personas de bajos recursos que no encuentran otras alternativas de generar ingresos. Ya en esta etapa los animales son capturados con redes, pegamento y jaulas diminutas, lo cual les causa estrés, lesiones e incluso la muerte. Posterior a esto es el turno del acopiador, quien recibe los ejemplares de la mano de los cazadores y se encarga de su distribución hacia los principales puntos de venta.
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En Argentina, éstos son Gran Buenos Aires, Córdoba Capital y Rosario, Santa Fe. Durante todo este proceso, los animales viajan hacinados, sin agua ni comida, se estresan, lastiman, su sistema inmune se deprime (deja de funcionar correctamente) y se vuelven más susceptibles a enfermar debido a los patógenos circundantes (agentes infecciosos que pueden provocar enfermedades a su huésped).
Problemas relacionados al tráfico ilegal
Son varias las problemáticas asociadas al tráfico ilegal de fauna silvestre. Entre ellas podemos mencionar: escapes accidentales o liberaciones intencionales, lo cual provoca que individuos que no están en condiciones óptimas de salubridad transmitan enfermedades a ejemplares silvestres, pudiendo incluso diezmar poblaciones silvestres locales.
En el caso de las especies exóticas, que son aquellas que no han evolucionado ni se han distribuido naturalmente en el ecosistema sino que fueron traídas por el humano desde otra región, ya sea de modo accidental o intencional, hay competencia con especies autóctonas a las cuales pueden llegar a desplazar, convirtiéndose entonces en una invasión biológica, como es el caso del estornino pinto o la ardilla de vientre rojo, ambas especies traídas al continente por su “belleza ornamental”, con fines de mascotismo; que hoy en día causan daños no sólo a nivel biológico sino también económico, social y de salubridad.
Pero, sobre todo, el tráfico ilegal de fauna silvestre provoca un vaciamiento de especies en los ecosistemas, lo cual reduce la cantidad de individuos que cumplen un rol biológico fundamental en el equilibrio de éstos. Y cuando los ecosistemas funcionan mal, los humanos nos vemos seriamente afectados.
Hablemos de salud: concepto “Una Salud” de la OMS
Una zoonosis es cualquier enfermedad infecciosa que se transmite de forma natural de los animales no humanos (en su mayoría vertebrados) al ser humano, y viceversa.
La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades. A su vez, el concepto de “una salud” implica el análisis amplio de la interacción entre seres humanos, animales y el ecosistema (agua, aire, suelo, biota, etc.) La salud humana y la sanidad animal son interdependientes y están vinculadas a los ecosistemas en los cuales coexisten.
Las esferas de trabajo especialmente pertinentes en el enfoque de Una salud son: la inocuidad de los alimentos, el control de zoonosis y la lucha contra la resistencia a los antibióticos. Muchos microbios afectan tanto a animales como a humanos cuando unos y otros viven en un mismo ecosistema. Los esfuerzos de solo un sector no pueden prevenir o eliminar el problema, de ahí la trascendencia del trabajo conjunto. Varias organizaciones lideran campañas para concientizar, como, por ejemplo, Aves Argentinas.
Asimismo, el ODS 3 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas busca “garantizar una vida saludable y promover el bienestar universal.” Para ello, habla de proporcionar una financiación más eficiente de los sistemas de salud, mejorar el saneamiento y la higiene, aumentar el acceso a los servicios médicos y proveer más consejos sobre cómo reducir la contaminación ambiental. (Productos químicos peligrosos y la contaminación del aire, el agua y el suelo).
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Salud Humana y Tráfico Ilegal de Vida Silvestre
Como ya se mencionó anteriormente, la fauna silvestre convive naturalmente con gran cantidad de patógenos, los cuales son acercados a la población humana cuando los animales son extraídos de su entorno de manera no regulada o sus hábitats son destruidos o fraccionados indiscriminadamente.
Algunas de las zoonosis y riesgos sanitarios asociados a este comercio ilegal son: psitacosis u ornitosis (aves); salmonelosis (reptiles); fiebre amarilla, viruela, ébola, tuberculosis, herpes virus B (primates); lepra (mulitas); leptospirosis; rabia; parasitosis; así como mordeduras, estrangulamiento y envenenamiento (mamíferos, ofidios, peces, artrópodos, etc.). Muchas de estas enfermedades no tienen cura.
La reciente pandemia de COVID - 19 y las anteriores como la influencia aviar o la porcina; han puesto en perspectiva el modo en que el ser humano se está relacionando con su entorno y los demás seres vivos, tanto domésticos como silvestres. Es un llamado a replantearnos nuestras acciones y a comprender que nuestra economía, nuestra salud y nuestro bienestar dependen de la salud y equilibrio de los ecosistemas y sus habitantes.
¿Qué hacer ante un caso de tráfico ilegal de fauna silvestre?
El modo de contribuir a eliminar este problema es no comprar ejemplares traficados ilegalmente, ni siquiera por lástima. Es importante disfrutar de las especies en libertad y permitirles cumplir su rol ecológico. Siempre que se esté ante la sospecha de un caso de tráfico ilegal, se debe denunciar ante las autoridades correspondientes. También es útil difundir y generar conciencia entre amigos y vecinos. Una herramienta para conocer donde denunciar es la página www.avesargentinas.org.ar/trafico, donde se puede acceder a un listado de sitios de denuncia según localidad.