La salvia es una planta similar al romero que ha sido venerada por siglos por sus múltiples propiedades beneficiosas para la salud. Su cualidades antisépticas, preservativas y antibacteriales le valen un lugar muy especial entre la plantas medicinales.
Por ser antiinflamtoria, es una opción viable para complementar dietas diseñadas específicamente para rebajar los centímetros de más en el abdomen.
Eso sí, debemos tener en cuenta que la salvia no se recomienda a mujeres durante la lactancia ni a pacientes con insuficiencia renal o inestabilidad neurovegetativa. Esto se debe a sus grandes cantidades de thuyona, un aceite esencial neurotóxico y que puede generar convulsiones. A su vez, tiene capacidad abortiva, por lo que no es recomendable en durante el embarazo.
Ahora que ya sabemos las medidas de seguridad, hablemos de los ingredientes necesarios y la preparación de la infusión de salvia.
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La mejor manera de consumir salvia es en forma de infusión. Lo único que necesitas es:
- 15 gramos de la planta, ya sea seca o fresca
- 1 litro de agua
- Zumo de limón
- Miel (opcional)
Calienta el agua hasta que hierva y luego vierte la salvia. Deja reposar unos tres minutos. Luego, añade zumo de limón a gusto. Si lo deseas, puedes endulzar este té con miel pura. Su sabor sin edulcorantes puede ser un poco amargo, pero siempre dependerá de tus preferencias.
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Es mejor tomar la infusión de salvia en ayunas, para que puedas experimentar los verdaderos efectos positivos en tu sistema digestivo: eliminación de toxinas y grasas.
Puedes consumir la infusión de salvia tanto fría como caliente. Puedes dejarla en un recipiente con tapa en el refrigerador y beber como un té frío cuando tienes sed o hacer una infusión con menos cantidad de salvia si es invierno y quieres calentar un poco el cuerpo o disfrutar de una pausa en el trabajo.
Por último, la salvia es solo un complemento de tu dieta sana, que debería ser rica en vegetales y frutas. No es milagrosa y no surtirá los efectos deseados a menos que tengas una base saludable en tu alimentación.
¿Tienes otras formas de incorporar salvia en tu dieta? ¡Cuéntanos!
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