Los gatos son uno de los animales domésticos preferidos del ser humano. Se caracterizan por ser cariñosos, misteriosos, amigables, dormilones y muy inteligentes. Poseen una excelente visión (pueden ver en la oscuridad) y son muy ágiles, lo que les permite ser excelentes cazadores.
Además, son muy sociables (les encanta estar con otros felinos) y suelen ser animales muy limpios gracias a la responsabilidad que asumen con sus necesidades fisiológicas, pues son ellos quienes empacan o esconden su orin o heces.
Entre otras curiosidades, los gatos pueden ser muy sensibles a las bajas temperaturas, de modo que es importante brindarles cuidados extras durante la temporada para que no sufran hipotermia.
Como sabemos que amas a los gatos, desde Protección Animal Mundial, te contamos cómo cuidarlos este invierno:
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¿Hay que aumentar la ración de comida?
Así como nosotros solemos aumentar el aporte calórico durante el frío, es lógico pensar que nuestras mascotas pueden necesitar lo mismo.
Sin embargo, los felinos que viven en un hogar pueden llegar a engordar si se incrementa su ración de comida, sobre todo si no hacen ejercicio. A menos que el veterinario indique lo contrario, deberán continuar con la dieta habitual.
Si bien nosotros no recomendamos dejar salir a pasear un gato solo, puede ser que elijas hacerlo de todos modos. De ser así, chequea que no pase mucho tiempo fuera en días de frío, sobre todo si nieva o las temperaturas son muy bajas, dado que podría sufrir hipotermia. De ser así, abrígalo con una manta, déjalo cerca de una estufa o calefactor y frótalo para que su cuerpo entre en calor.
¿Y los gatos de poco pelo?
Si tienes un gato con poquito pelo, como el Siamés, Esfinge o Ruso Azul, será necesario sumarles un abrigo, como un suéter pequeño o alguna mantita. Además, puedes dejar su cama cerca de algún artefacto que emane calor y alejarlo de ventanas o lugares donde pueda hacer más frío.
¿Qué sucede si mi gato está enfermo?
Los gatos que sufren de enfermedades articulares y del aparato locomotor, como por ejemplo la artrosis y artritis, o patologías en su sistema respiratorio, renal y cardíaco, pueden llegar a sentir dolor con el frío, por lo que será importante que prestes especial atención a sus necesidades.
Si tu gato se ha resfriado, es importante llevarlo al veterinario para conocer qué tratamiento precisa y evitar así que empeore. Te darás cuenta de su gripe porque tendrá los ojos llorosos, estornudos, mucosidad y decaimiento. No dejes pasar la situación y visita a su médico para evitar que derive en alguna afección del pulmón.
Cuidados para un gato bebé
Los felinos bebés o aún cachorros recién están desarrollando su sistema inmune, de modo que pueden sufrir más frío o, incluso, estar más expuestos a contraer enfermedades. Consulta con tu veterinario si precisa alguna vitamina o complemento, así como también procura mantenerlo calentito, darle un buen alimento y aplicarle todas las vacunas que precisa para estar saludable.
Consideraciones para gatos abuelos
Al igual que los cachorros, los gatos de más de 7 pueden tener otras necesidades debido a su edad más avanzada. Como en todos los casos, es importante darle un alimento que contenga todos los nutrientes que precisa y la cantidad necesaria de las calorías que su cuerpo demanda. A su vez, es importante hacer controles periódicos con el veterinario, especialmente en esta temporada, para chequear si precisa de algún cuidado extra.
Cuidados en general
Además de darle calor con mantas o jerseys, en todos los casos puedes considerar elevar su cama del suelo para que no toque el piso frío.
Por otra parte, su pelo es su mayor protección, por lo que deberás cepillarlo habitualmente, a fin de evitar que se le enrede o tenga dermatitis.
Éste último punto es súper importante porque si su piel se enferma, no podrá desarrollar las condiciones necesarias para cambiar el pelaje y tenerlo sano.
¡Esperamos que estos tips te hayan servido y que disfrutes mucho de darte calorcito junto a tu amigo/a!