Poor Knights Islands es un archipiélago volcánico compuesto por dos islas mayores, Tawhiti Rahi y Aorangi, y algunos islotes más pequeños. Este conjunto de islas de más de 11 millones de años de vida está localizado al este de la isla norte de Nueva Zelanda, concretamente a unos 50 kilómetros en dirección noreste de la ciudad de Whangarei.
Antiguamente en ellas vivía la tribu ‘Ngati Wai’, pero se encuentran deshabitadas desde la década de 1820 cuando ocurrió una terrible y trágica masacre entre distintas tribus maorís. Desde entonces los nativos las consideran un lugar sagrado.
En 1981 su parte terráquea fue declarada reserva natural y, posteriormente, el área náutica ubicada hasta 800 metros de la costa fue nombrada reserva marina protegida. Este horizonte azul se ha ido convirtiendo en un paraíso para amantes del buceo con el paso de los años.
El origen del curioso nombre del archipiélago no está del todo claro, pero hay varios relatos que ofrecen diversas posibilidades para resolver el enigma. El afamado historiador neozelandés John Cawte Beaglehole, especialmente conocido por la edición de tres diarios de exploración del expedicionario James Cook, sugirió dos versiones.
La primera de ellas afirma que se debe a la relación que las islas guardan con los caballeros de la orden de Windsor de Inglaterra, que informalmente eran llamados los caballeros pobres. La segunda opción apunta que se debe a la semejanza de su silueta con la forma del “Poor Knights Pudding”, un plato preparado a base de una rebanada de pan sumergida en huevo y leche y frita a continuación. Sería algo similar a lo que hoy conocemos como ‘French Toast’ pero sin los aditivos dulces que la convierten en un desayuno o postre, como puede ser el azúcar, la canela o la vainilla.
En la parte más meridional de Maroro Bay encontramos ‘Rikoriko Cave’, la cueva marítima más grande del mundo según su volumen. La entrada es suficientemente amplia para que los barcos turísticos penetren en ella, y ya en su interior tiene unas dimensiones de 130 metros de largo por 80 metros de ancho, acompañados por 35 metros de altura. Para hacernos una idea aplicable a construcciones más familiares, el campo de fútbol de la Bombonera, en Buenos Aires, mide 105 metros de largo y 68 metros de ancho, así que cabría perfectamente dentro de la gruta.
El relieve y belleza de las islas unida a la gran variedad de especies terrestres, aéreas y acuáticas las convierte en un destino maravilloso. Su increíble orografía nos regala salientes crestas, misteriosas cuevas, espectaculares arcos y estrechos túneles que son difícilmente superables.
La biodiversidad marina del entorno es apabullante, pudiendo encontrar ballenas, orcas, delfines, tiburones cobrizos, el mao mao azul, jardines de esponjas, erizos, crustáceos, escuadrones de rayas, meros montados, mantas, peces escorpiones, morenas mosaico, peces mariposa de Lord Howe, anguilas, formaciones de anémonas o campos de gorgonias, solo por mencionar algunas de las más de 125 especies de peces que encontraremos en este ambiente único.
Debido al alto nivel de protección del archipiélago, solo compañías de buceo muy específicas o grupos de científicos con el permiso pertinente pueden acceder a este hábitat, y es por ello que se trata de un medio poco transitado y que conserva una fauna y flora muy vírgenes. Buceadores experimentados y principiantes sueñan con llegar a este recóndito escondrijo del planeta, considerado como uno de los diez mejores destinos de buceo del globo.
Desde enero hasta abril la temperatura del agua se encuentra entre 20-23°C y se puede visualizar el ecosistema hasta alrededor de 20 metros de distancia. De mayo a comienzos de septiembre la temperatura cae hasta unos 15-16°C, aunque debido a que las aguas están más calmadas y tibias la claridad aumenta pudiendo divisar seres vivos hasta unos 30 metros.
En septiembre y hasta el inicio del año la temperatura comienza a aumentar de nuevo y la mayor concentración de plancton reduce el campo de visión hasta tan solo 10 o 15 metros, si bien disfrutaremos de una mayor cantidad de peces debido a la gran abundancia de su alimento primario.
Una leyenda histórica del universo marítimo, el mítico conservacionista y científico Jacques Cousteau, describió estas islas como el mejor destino de aguas templadas del mundo. Sinceramente, no esperamos recibir una recomendación mejor próximamente.