Una ecoaldea es una comunidad intencional cuya intención es ser social, ecológica y económicamente sostenible. Su desarrollo se basa en un respeto por la naturaleza, en el uso de energías renovables, la sustentabilidad tanto alimenticia como económica, el reciclaje y el uso de materiales de construcción ecológicos.
Robert Gilman en su informe "Ecoaldeas y comunidades sustentables" (1991), ofrece la siguiente definición:
"Una ecovilla o ecoaldea es un asentamiento ecológico de características propias, a escala humana, que integra actividades humanas que no dañan el medio ambiente, apoyando un desarrollo sano y que puede ser continuada hacia el futuro indefinido"
La próxima definición de ecoaldea, fue aceptada en Dinamarca cuando diferentes proyectos crearon una Organización Nacional de Eco-Villas en 1991.
"Las ecovillas o ecoaldeas son asentamientos sustentables en zonas rurales o urbanas, que respetan y restauran los sistemas de circulación de los cuatro elementos: Tierra, agua, fuego y aire en la naturaleza y en la gente."
Comprenden todos los aspectos de la vida humana:
Estructuras físicas (Tierra)
Infraestructura (Agua)
Estructuras sociales (Fuego)
Cultura (Aire)
Esta forma de definir una Ecovilla tiene varias ventajas: retoma la sabiduría ancestral de todo el planeta, les da igual valor todas las esferas de la vida. La visión ecológica y espiritual son igualmente importantes. Un pájaro tiene dos alas para volar. La intervención propia es la herramienta de medida para las ecoaldeas. Finalmente obtenemos una definición de lo que realmente es el "desarrollo", lo cual le devuelve el sentido a la palabra desarrollo. Todos nosotros nos estamos desarrollando hacia hábitats sustentables, afortunadamente.