Viajar no siemprese trata de ir a un sitio caluroso junto al mar, ir a las mejores fiestas obuscar los mejores restaurantes. A veces viajar implica alejarse del bulliciode las ciudades y las personas, en su mayoría. Podemos viajar con alguien más,pero a un destino solitario, y es en las montañas y bosques donde esos lugaresofrecen su mejor refugio.
Las cabañas sehan convertido en un objeto de placer para muchas personas que cada ciertotiempo necesitan alejarse del caos de la vida diaria.
Hay algunas que soncompletamente dependientes de un centro de descanso, en las que puedes esquiary tener muchas actividades, sin embargo, también están esas en las que el propósitoes frenar el estilo de vida citadino, obligarte a relajarte, a concentrarte enel paso del tiempo y a admirar la vista, que parece extenderse hacia elinfinito en todas direcciones.
Cabañas de cristal
A pesar de que en temporada alta sí es un sitio en el que la gente puede encontrar fiestas y bullicio, estas cabañas de lujo en los Alpes austriacos fueron diseñadas para conectarte con la naturaleza y regalarte una de las mejores vistas de unas de las montañas más hermosas del mundo. Con una cubierta que te permite ver el paisaje en 360 grados, se trata de una experiencia realmente costosa, pero que vale la pena.
Ufogel
Su diseño únicono es lo único que la hace espectacular. Situada en las mismas montañas que lascabañas de cristal, este lugar sólo permite la entrada a cinco personas, por loque el aislamiento es por lo que pagas. Una mezcla entre un ovni y un vogel(palabra alemana para pájaro), se trata de una cabaña futurista que te haráapreciar la naturaleza con otros ojos.
Casa Lola
Entra las montañas cercanas al parque nacional Monti Sibillini en Italia, esta cabaña con siete habitaciones cuenta con su propia piscina, pues no todo se trata de ir a montañas en las que la nieve es la principal atracción. El verano italiano se puede vivir en Roma o Florencia, pero tal vez desde las alturas la vista sea un poco mejor.
Monte Cook
Nueva Zelanda es un país que muchos quieren conocer, pero su lejanía y sus elevados costos lo hacen casi imposible. Sin embargo, si logras llegar al país kiwi, no dejes la pasar de visitar sus parques nacionales y quedarte en una cabaña como esta. Lo mejor es que tienen distintas opciones de hospedaje y cada cabaña vale la pena, pues te muestra distintas caras de las montañas.
Gran Cañón
El Gran Cañón representa una vista espectacular para todo el que lo visita. Recorrerlo supone cumplir uno de los sueños de muchos estadounidenses y no es por nada, los colores de las rocas y el atardecer son inspiradores. Sin embargo, algo que pocos saben es que hay distintas cabañas en las que te puedes hospedar. Imagina despertar justo cuando el sol sale en uno de los paisajes que han inspirado a millones de personas.
Las cabañas en las montañas nos obligan a relacionarnos con la naturaleza y entender que somos finitos, que ellas estuvieron antes y seguirán mucho tiempo después de nosotros, pero que por ahora, podemos sacar el mayor provecho de nuestras vidas.