Global
México
España
Argentina
Colombia
EEUU
Chile
Perú
Costa Rica
Uruguay
Cada vez es más frecuente que te encuentres con personas con las que la comunicación se te complica. Sin embargo, esto no quiere decir que esas personas sean las del problema. Alguna vez te has preguntado: ¿y qué tal si soy yo?
En esta ocasión te traigo tres características que claramente afectan la comunicación en cualquier tipo de relación. Con ellos podrás identificar de dónde está viniendo el problema. Y aunque no lo creas, es mejor si tú eres el origen. Ya que de lo único que tienes el control y el poder para cambiar es a tu propio ser.
1. Responden mucho y escuchan poco
Para que una conversación pueda fluir adecuadamente debe haber una interacción constante entre los involucrados.
Al estar en modo 'respuesta', la atención de estas personas se centra en '¿Qué voy a decir ahora?' o '¿Cómo voy a defenderme de esto?' lo que hace que su interlocutor se sienta desatendido y genera confusión ya que no necesariamente la respuesta está vinculada con lo que la otra persona estaba diciendo.
2. Se centran en su persona y no en un dialogo
Las personas complicadas tienden a interrumpir constantemente, no escuchar al otro con atención y muchas veces hasta cambiar el tema de conversación a algo que les interese más.
Al centrarse en sí mismas, estas personas pueden malinterpretar los mensajes que reciben del otro, debido a que su falta de escucha hace que la información se procese parcialmente.
Esto puede verse reflejado también en respuestas con monosílabos cómo :'ajá' , 'si', 'no', 'bueno', 'ok', los cuales interrumpen la comunicación ya que no son una retroalimentación adecuada ante la información que proclamó el interlocutor. Este tipo de respuestas son adecuadas cuando se ha realizado anteriormente una pregunta 'cerrada'. Por ejemplo: ¿Estás de acuerdo?, ¿Estás bien? A diferencia de ¿Qué opinas? o ¿Cómo te fue hoy?
3. Pierden la compostura
El lenguaje no verbal es parte crucial de la comunicación y muchas veces puede llegar a expresar aún más que las palabras.
Aquellas personas que tienden a tener conflictos en el momento de comunicarse muchas veces expresan con gestualidad disgusto, insatisfacción, estrés o hasta incomodidad. Esto en varias ocasiones es desproporcional a lo que la otra persona está diciendo o desvinculado con el mensaje que el interlocutor intenta transmitir.
Se vuelve complicado porque el lenguaje no verbal tiene una alta carga emocional, tanto para el que lo expresa como para el que lo recibe. Creando así un ambiente de tensión y poca asertividad.
Puede sonar complejo y hasta imposible lidiar con personas así, pero en algunas ocasiones puede ser que tú seas una de esas personas y ni te hayas dado cuenta. En la siguiente entrega hablaremos de cómo manejar conversación en circunstancias cómo estás así que mantente pendiente.
Si sientes que tú puedes estar actuando como una persona complicada en alguna de tus relaciones o si estás tratando con una constantemente y esto te está afectando, puedes contactarme con confianza a través de mi página web.
