Global
México
España
Argentina
Colombia
EEUU
Chile
Perú
Costa Rica
Uruguay
El Reino Unido es uno de los pocos países del mundo que ha declarado la emergencia climática, y ahora uno de sus partidos políticos ha creado un plan para establecer la transición definitiva hacia sistemas de energía limpia para 2030.
De acuerdo con el plan propuesto por el partido Laborista, un área del Reino Unido del tamaño de 22.000 campos de fútbol podría quedar cubierta con paneles solares en virtud de una estrategia que ayudará a cumplir el objetivo de reducir a cero las emisiones netas de carbono para dentro de 10 años.
La propuesta forma parte de un conjunto de 30 recomendaciones, entre las que también se sugieren mejoras de infraestructura (aislamiento, acristalamiento, etc.) en cada hogar del Reino Unido, y construir un total de 9.000 turbinas eólicas.
La secretaria de Negocios, Rebecca Long Bailey, dijo que el plan podría generar un beneficio neto de £ 800 mil millones (más de $ 1 billón) para la economía en 2030, y crear 850.000 nuevos empleos verdes calificados.
[También podría interesarte: Hábitos para reducir la huella hídrica y preservar los recursos del planeta]
La conferencia anual del partido Laborista respaldó este plan para reducir las emisiones de carbono como parte de un “Nuevo Acuerdo Verde”, pero ha encontrado oposición por parte de los representantes de los trabajadores del sector energético, quienes advirtieron que estas nuevas medidas podrían tener consecuencias muy negativas para la industria.
Sin embargo, Long Bailey insiste en que las nuevas propuestas serían buenas para los trabajadores y ayudarían a cumplir los objetivos internacionales para combatir el cambio climático y mantener el aumento de la temperatura global por debajo de 1.5° C por encima de los niveles preindustriales.
[También podría interesarte: Los 5 países del mundo más dependientes de los combustibles fósiles]
La coalición internacional “30 para 2030”, de la que forman parte el Reino Unido y Costa Rica, entre otros, propone que el 30% de la solución para la emergencia climática puede aplicarse reforzando los mecanismos protectores de la naturaleza, como la reforestación y la protección de los océanos.
Como parte de este plan, el Reino Unido identificó cuatro objetivos clave para transformar el suministro y uso de energía de la región para el 2030:
1. Reducción del desperdicio de energía en edificios e industrias
2. Independizarse del carbón como fuente de calor
3. Impulsar la generación de electricidad renovable y baja en carbono
4. Equilibrar la oferta y la demanda del Reino Unido
Se estima que las consecuencias para la salud pública de reducir las emisiones podrían ahorrarle al servicio británico de salud £ 400 millones al año, evitando hasta 6.200 muertes al año relacionadas con las vías respiratorias al reemplazar los combustibles fósiles con energía renovable.
Con este plan, el Reino Unido no solo aplica medidas contra el cambio climático, sino que también trata de integrar nuevos trabajos al mercado laboral de la energía verde y cuida la salud de sus habitantes.
Fuentes:
