La era de la tecnología llegó para quedarse y cada día vemos cómo se expande a todas las áreas de nuestra vida.
Esto tiene muchas ventajas, como la comunicación constante desde cualquier lugar del mundo y el acceso inmediato a la información, pero también implica muchos riesgos. Según los expertos, uno de los objetivos más frecuentes de los ataques informáticos son los teléfonos inteligentes, más específicamente, los equipos con Android.
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Las amenazas más comunes son los ataques a correos electrónicos, las descargas involuntarias, los ataques a redes públicas de Wi-Fi y los paquetes de programas maliciosos (malware) que algunas páginas contienen.
¿Qué es lo más alarmante? Las amenazas cibernéticas siguen aumentando. Aprovecha estos 9 consejos para protegerte.
1. Mejores contraseñas
Utiliza contraseñas largas y complicadas, y aplica otros métodos de autenticación como los gestos o PIN.
2. Desconfía de los archivos adjuntos
No hagas click a los archivos adjuntos o links de correos de personas que no conozcas. También desconfía de los enlaces que recibes por mensaje de texto o WhatsApp.
3. Cuidado con las transacciones en línea
Siempre verifica que la página del banco sea legítima o puedes ser víctima de un engaño. Revisa el logo, URL y mantente alerta ante errores gramáticos o de ortografía.
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4. Mantente alerta en las redes
Verifica la identidad de las personas que te envían solicitudes de amistad en redes sociales. Algunos "ciber-criminales" envían solicitudes con la intención de robarte información o engañarte para que hagas click en páginas maliciosas.
5. Compara tu resumen bancario
Lleva un registro de gastos para poder compararlos a fin de mes con el balance de compras realizadas en línea. Si lo haces por escrito, rómpelos antes de tirarlos a la basura.
6. Actualiza tus sistemas
Las actualizaciones vienen con los parches de seguridad más recientes y te protegen de amenazas.
7. Evita las redes públicas de Wi-Fi
Un atacante puede robarte información o infectar tus dispositivos si se conecta a la misma red que tú.
8. Revisa el protocolo
Cuando navegues por una página que contiene información sensible como cuentas bancarias o claves de usuario, siempre verifica que la dirección de la página comience con HTTPS y no HTTP. El protocolo HTTPS es más seguro.
9.Ten una solución de seguridad a la mano
Ya sea un antivirus, antimalware o un firewall. Además, realiza respaldos en localizaciones externas. En caso de que pierdas información, podrás recuperarla al menos parcialmente.