Poseidón es el nombre de la nueva arma rusa que provoca 'tsunamis radioactivos' de 500 metros de altura. El presidente de Rusia Vladímir Putin está listo para utilizarla en el círculo ártico. La potente construcción estará plenamente operativa y se desplegará finalmente en 2022.
Los objetivos de Rusia con Poseidón son evidentes. El primero es desestabilizar el delicado equilibrio armamentístico con Estados Unidos y China para así tener aún más protagonismo en la escena internacional. Ninguna de estas dos potencias puede acabar con Poseidón. El segundo es reafirmar su posición de dominio en el círculo polar ártico para así controlar la nueva ruta marítima abierta. Una nueva ruta al que Putin llama "el nuevo canal de Suez" y que se ha originado por el deshielo producto del calentamiento global.
Un peligro real
De acuerdo con la información suministrada por la agencia rusa TASS, la base de despegue de Poseidón está casi terminada. Imágenes satelitales también confirman la construcción de esta base. La inteligencia naval noruega y estadounidense afirman que el peligro es real.
En declaraciones a CNN, el vicealmirante Nils Andreas Stensønes, jefe de los servicios de inteligencia noruegos, confirmó que Poseidón es parte de un nuevo armamento nuclear. Un arma que está en fase de pruebas, pero que es un sistema estratégico y está apuntando a objetivos.
“Tiene una influencia que va mucho más allá de la región en la que lo han probado hasta ahora”.
La premisa de Poseidón es muy sencilla y absolutamente aterradora. Se trata de un dron subacuático capaz de burlar cualquier defensa oceánica actual. Incluso las redes de micrófonos y navíos que Estados Unidos tiene en su costa para detectar submarinos de ataque no pueden detectarlo. Este nuevo torpedo puede inundar las costas de EE. UU con tsunamis radioactivos.
Armamentos potentes
Ya se conoce bastante sobre Poseidón, sin embargo, todavía no se tiene toda la información para considerar con certeza que es un arma terrorífica. El dron autónomo en forma de torpedo posee un tamaño estimado de 24 metros de largo por dos metros de diámetro. También es totalmente independiente gracias a un sistema de navegación interno que no necesita GPS. Además, tiene un alcance de más de 10.000 kilómetros gracias al reactor atómico que alimenta su turbina.
Poseidón puede viajar hasta 1.000 metros de profundidad a una velocidad de hasta 70 nudos, unos 130 kilómetros por hora. El submarino más avanzado de la armada solo llega a un máximo de 490 metros y puede viajar a 20 nudos en modo silencioso y 35 nudos a máxima velocidad, no es rival.
Con una cabeza de 100 megatones, Poseidón demuestra en las simulaciones que puede generar tsunamis radioactivos de medio kilometro de altura. Suficiente para borrar del mapa una ciudad como New York, y no solo destruiría todo a su paso, sino que contaminaría la ciudad y la haría inhabitable durante cientos de años.