El feng shui es un antiguo sistema de origen taoísta (religión china) que está basado en la conciencia de la armonía del espacio, y los efectos energéticos positivos que tienen los espacios organizados y equilibrados en las personas que los habitan.
Aunque por muchos es considerado poco más que un montón de supersticiones sin mucho amparo en la realidad, muchos otros creen que sus métodos nos ayudan a alcanzar espacios armoniosos donde nos sentimos a gusto. Creas lo que creas, estas son ocho enseñanzas que puedes probar si deseas tener un espacio organizado y limpio.
Dato curioso: en chino, “feng shui” se pronuncia “fóng shú-ei”. ¡Úsalo para impresionar a tus amigos la próxima vez que el tema aparezca!
[También podría interesarte: Ordena tu billetera según el Feng Shui para atraer riqueza a tu vida]
Promueve las energías positivas
Por mucho que algunos critiquen al feng shui, nadie puede negar que un espacio organizado, limpio y armonioso es un placer. Los espacios desorganizados y caóticos atraen sentimientos negativos de insatisfacción que no nos permiten habitar el hogar de forma cómoda.
Con los métodos del feng shui se pretende promover el flujo ininterrumpido de energías positivas hacia y por las habitaciones del hogar.
Piensa en la casa como un organismo
En el feng shui el hogar es pensado como un organismo vivo. La entrada es la boca, la cocina es el estómago, los dormitorios el corazón. Así, la puerta de atrás sería el lugar por donde se eliminan los desechos. Este principio es importante tenerlo en cuenta para crear prioridades sobre dónde corresponde dejar los desperdicios del hogar.
Limpia de adelante hacia atrás
Si vas a barrer el piso, comienza desde la puerta de adelante y ve moviendo el polvo desde la entrada hacia la salida trasera, donde lo desechas. Lo mismo vale para cuando vayas a trapear o fregar el piso con mucha agua.
¿Y si tienes una sola puerta?
En apartamentos, o incluso en algunas casas, solo existe la puerta de entrada. Si este es tu caso, entonces debes proceder desde el fondo hacia la entrada, como si el organismo expulsara por la boca la comida que le cayó mal.
Elimina muebles y objetos que no tengan utilidad
Si tienes algún mueble que ya no sirve o ya no usas y que no hace más que acumular polvo en algún lugar, es mejor desecharlo o dárselo a alguien que vaya a darle buen uso. Lo mismo va para estantes, mesas, cuadros, botiquines, cajas y en general cualquier objeto que esté de más.
Es fundamental que te libres de todos los objetos que no tienen uso. La energía no fluye correctamente en lugares atiborrados.
Coloca las plantas estratégicamente
Las plantas son ideales para refrescar la casa. Si vas a colocar plantas ornamentales de maceta, procura ubicarlas preferiblemente en las esquinas. En cualquier caso, es importante que guardes las proporciones del espacio. Es decir, el tamaño de la planta y la maceta debe ser armonioso con respecto a la habitación.
Evita tener en tu hogar plantas moribundas o en mal estado.
[También podría interesarte: Cómo organizar tu dormitorio según el Feng Shui]
Usa aromas naturales
Una buena idea para hacer esto es aplicar hojas de albahaca, menta u orégano al agua con la que vas a limpiar la casa. Además, puedes incorporar un chorrito de colonia o extracto de violetas suaves, para darle un olor agradable y natural a todos los ambientes.
No fumes dentro de la casa
El humo de nicotina vicia el aire interior. Además, expone a los no fumadores a sus efectos negativos.
¿Qué te parecen estos consejos? ¿Te gustaría ponerlos en práctica?
[También podría interesarte: Cómo usar los colores según el Feng Shui en el hogar]
Fuente: