Son raras las ocasiones en las que los fenómenos espaciales influencian directamente nuestro día a día, pero a mediados de marzo una poderosa tormenta solar golpeará nuestro planeta y los efectos pueden ser significativos para nuestros equipos electrónicos.
Las tormentas solares se originan, evidentemente, en nuestro Sol, y se deben a la inestabilidad de su superficie, donde se dan con frecuencia poderosas explosiones, eyecciones de radiación y violentas ráfagas de viento solar. En raras ocasiones, como esta, la expulsión de radiación electromagnética es tan intensa que se forman nubes de gas que se propagan por el espacio y alcanzan nuestra atmósfera.
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Según los expertos del Laboratorio de Astronomía Solar de Rayos X de la Academia de Ciencias de Rusia, una potente detonación de radiación solar causará una tormenta geomagnética a partir del 15 de marzo. ¿Cuáles pueden ser sus efectos sobre nuestros dispositivos?
A pesar de que suena como algo muy preocupante y grave, sus efectos no son tan atemorizantes, pero sí deben tenerse en cuenta. Uno de ellos es la formación de auroras boreales o australes (hemisferios norte y sur, respectivamente), y más probablemente, la interferencia de las comunicaciones.
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Si bien nuestra atmósfera nos protege de la radiación despedida por las tormentas solares, las capas más altas sufrirán un incremento de temperatura y esto interfiere con el funcionamiento de los satélites artificiales humanos que gestionan la telefonía, el internet, las telecomunicaciones, los sistemas de GPS y las rutas marítimas y aéreas.
Los estimados indican que la tormenta solar nos alcanzará el 15 de marzo, pero se irá intensificando con el paso de los días y llegará a su punto máximo el 18, así que no te sorprendas si tu conexión a internet o tus mensajes de texto fallan o tardan más de lo normal. A menos que suceda algo muy inesperado, eso es lo peor para lo que debemos estar preparados.