Existen varias obras literarias de ciencia ficción y literatura fantástica, en las cuales aparece el concepto de doppelgänger , un tipo de metamorfo que imita a una persona o especie en particular por alguna razón. La palabra proviene de doppel, que significa «doble», y gänger, traducida como «andante».
Su forma más antigua, acuñada por el novelista Jean Paul en 1796, es Doppeltgänger, 'el que camina al lado'.El término se utiliza para designar a cualquier doble de una persona, comúnmente en referencia al «gemelo malvado» o al fenómeno de la bilocación. Al día de hoy, existe una fantasiosa creencia que plantea que todos tenemos un gemelo, un doble, un doppelgänger que es físicamente idéntico a nosotros aunque no tenga el mismo origen biológico.
El fotógrafo canadiense François Brunelle, tomó este concepto y realizó una serie de retratos que representan esta idea. Reunió muchos pares de personas totalmente desconocidas, extraños entre sí pero que, sorprendentemente se asemejan físicamente de forma increíble, como si se tratara de gemelos idénticos.
En un principio el fotógrafo retrataba personas a las que les habían dicho que se parecían entre sí, poniendo parte del trabajo de encontrar estos apres en manos de círculos pequeños de amigos o familias.
Cuando los medios de comunicación comenzaron a difundir su proyecto, las sugerencias de parecidos para sus fotografías comenzaron a llover. Los retratos se multiplicaron, haciéndonos creer que hay determinados fenotipos y características genéticas similares entre personas de diferentes partes del mundo.