En una sociedad donde la belleza se convierte en un factor condicionante, los actores y personas de la farándula están sometidos al qué dirán y, por ende, a prejuicios a la hora de exponerse frente a las cámaras. Lo cierto es que su imagen es una requisito fundamental para ser popular.
Y en este punto cabe preguntarnos: ¿Qué lugar ocupan las emociones y sentimientos? No podemos negar la realidad. Este nivel generalizado de desigualdad y las diversas percepciones no se da solamente Hollywood, existe en todo el mundo. Miles de personas quedan relegados y presionadas por la sociedad debido a su apariencia física.
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Julia Roberts y un mensaje empoderado
La actriz de cine y protagonista de películas tales como “Mujer Bonita”, "Magnolias de acero" y "Runaway Bride", por mencionar algunas ha tomado la decisión de desobedecer las etiquetas. Con total libertad y autenticidad decidió cómo le gustaría que la vieran en público, en la pantalla y en su vida personal.
¿Sabías que se convirtió en la primera mujer en ser considerada la intérprete más rentable? Así lo afirmaron diversos distribuidores estadounidenses.
En exclusiva para la revista You, se dieron a conocer confesiones de Roberts quien afirma que afrontó un gran riesgo en Hollywood al no someterse a un estiramiento facial. Admitió que tomó la decisión con seguridad dado que rara vez se preocupa por la apariencia de su piel.
“Me arriesgué al renunciar a la cirugía” dijo Julia Roberts.
Una mujer con convicciones y segura de sí misma
¡Belleza más allá de estereotipos! La imagen condiciona y cumple un rol fundamental en la construcción social de identidades. Hemos sido criados en un contexto donde encajar en las expectativas impuestas es un requisito.
¿Por qué recibimos críticas cada vez que nos rebelamos e incumplimos estos mandatos?
Cabe mencionar que en esta era los diferentes géneros reciben etiquetas que pretenden encasillarnos en un modelo exitoso y aceptado promoviendo un ideal de belleza inalcanzable.
¡De ahí que la decisión de Julia Roberts marca un antes y un después y se traduce en un acto digno de emular!