Increíble es una palabra apropiada para definir el arte que practica Michael Grab, un artista que desafía las leyes de gravedad con estructuras de rocas que se balancean y que parecen casi imposibles.
Michael Grab es un artista canadiense de treinta años que ha desarrollado —con mucha influencia de cierto arte antiguo de pegado natural de piedras— una técnica de equilibrio pétreo a la que él mismo ha denominado Gravity glue. Es, justamente ‘pegar’ piedras y armar grandes construcciones con estas en lo que consiste su arte.